(Río Grande, abril 22 de 2013) – El diputado nacional por Tierra del Fuego Jorge Garramuño (MPF) admitió sentirse presionado por organizaciones civiles que organizaron una campaña para forzarlo a votar en contra de la reforma judicial. El tema se tratará en la Cámara baja este miércoles y Garramuño es considerado uno de los doce legisladores que aún no han definido su voto en relación a la polémica iniciativa oficial.
En diálogo exclusivo con Radio Fueguina, el diputado aseveró que “Yo tengo una postura tomada y no la voy a cambiar”, a la vez que aseguró que no ha recibido presiones desde el oficialismo para sugerirle una postura.
En ese marco, Garramuño adelantó su voto negativo a las tres proyectos que serán puestos a debate y explicó las razones que le asisten. Consideró la elección popular de los integrantes del Consejo de la Magistratura como “peligroso”, porque podría llevar a un gobierno, “a una persona o un partido a gozar de la suma del poder público”.
En cuanto a agregar fueros a la estructura judicial, consideró que hay “Algunos artículos que pueden ser rayanos a la inconstitucionalidad”. “No encuentro qué agilidad le va a dar, al contrario, va a burocratizar aún más al Poder Judicial”, desconfió.
El diputado fueguino coincidió en la necesidad de modificar el Poder Judicial, pero “No se puede cambiar en quince días, a lo macho”, replanteó.
A continuación, Garramuño criticó la iniciativa de un grupo de entidades civiles que quieren influir en su postura: “Sin haber hecho nada podés transformarte, según la oposición en salvador de la patria o en infame traidor”, censuró.
“Es lamentable que nuestro país funcione con extremos”; “me sigue molestando que así como se le critica al oficialismo actitudes rayanos en lo que no es democrático, a veces desde la oposición se toman caminos similares”, cuestionó Garramuño.
Respecto del método adoptado para exigirle que vote en contra del proyecto del kirchnerismo, el diputado fueguino juzgó que las entidades que propician la campaña “Están equivocando la estrategia”. Se manifestó “Molesto por el hecho de que nadie me preguntó” cuál era su postura.
“Creo que de acá al miércoles las presiones van a existir, me quedo con la tranquilidad de que tengo una postura tomada y no la voy a cambiar”, clarificó, pero volvió a criticar la campaña para presionarlo expresando que “Lo siento como una posición absurda, me hace perder el respeto que tengo por estas entidades”.
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