En una final no apto para cardíacos, Inter debió sufrir hasta último momento para ganar su tercer scudetto consecutivo y el 16to de su historia al vencer por 2 a 0 al Parma con un sensacional doblete del sueco Zlatan Ibrahimovic. Zanetti y Cruz fueron titulares, mientras que Burdisso y Crespo estuvieron en el banco; Cambiasso lo disfrutó lesionado.
Roma, que luchó incansablemente y estuvo a punto de dar la gran sorpresa, empató de visitante 1-1 ante Catania y debió conformarse en el segundo lugar.
Tras un mes y medio de ausencia por una lesión, el sueco Ibrahimovic marcó en el segundo tiempo los goles del triunfo del Inter, que terminó con 85 puntos frente a los 82 de la Roma.
Este scudetto vale más que los dos anteriores. Inter salió campeón en 2005-06 cuando Juventus y Milan, que terminaron adelante de ellos en la tabla, fueron descalificados por estar involucrados en un escándalo de arreglo de partidos. Inter repitió el año pasado, aunque Milan arrancó la temporada con un castigo de ocho puntos y Juventus en la Serie B como castigo por el escándalo.
También hoy, un gol del argentino Pablo Osvaldo a los 76 minutos le dio a la Fiorentina el triunfo 1-0 sobre Torino para asegurar el cuarto puesto y el último boleto de Italia para la próxima edición de la Liga de Campeones. Milan quedó quinto pese a su victoria 4-1 sobre Udinese y se perderá disputar el máximo torneo europeo a nivel de clubes.
El atacante uruguayo Jorge Andrés Martínez salvó al Catania del descenso al meter a cinco minutos del final el gol que estableció el empate ante la Roma. Livorno, Parma y Empoli descendieron de categoría.
La Serie A tuvo un término de campeonato dramático y emocionante, con la Roma que se puso en ventaja a los ocho minutos tras el gol del serbio Mirko Vucinic, quien superó a tres defensores y con un tiro ajustado al palo superó al portero del Catania. En ese momento, Roma era campeón de Italia.
La ilusión le duró hasta los 62, cuando Ibrahimovic anotó el primer gol con un potente derechazo. A los 78, esta vez de izquierda, marcó el segundo y definitivo.
Justamente para tratar de evitar el empate, que le significaría perder el título, Roberto Mancini, técnico del Inter, mandó a la cancha a Ibrahimovic a los 50 en sustitución del brasileño César.
Ibrahimovic cambió totalmente al Inter y dejó en evidencia que la ausencia del delantero fue determinante para que debiera luchar hasta el final para ganar el título.
Doni, arquero brasileño de la Roma, salvó su arco y el triunfo con atajadas espectaculares, pero al final llegó el gol del uruguayo Martínez.
Inter había tenido la oportunidad de ceñirse la corona con tranquilidad, cuando le habría bastado un triunfo en cualquiera de los últimos dos partidos. Roma estuvo a punto de arrebatarle el título al alcanzar reducir la distancia en tres meses de 11 a un punto, de los cuales cinco fueron borrados en las últimas dos fechas.
A los tifosi interistas y romanistas se les prohibió asistir a los último encuentros fuera de casa por razones de seguridad. Sin embargo, un millar de hinchas interistas entraron igualmente al estadio del Parma.
Como las cosas de la vida, mientras los interistas celebraban de inmediato el nuevo y sufrido título en su ciudad de Milan, la Roma asumía con dignidad una derrota que no siente como tal.
Inter lo hizo honor a su nombre, Internazionale, en la conquista del nuevo scudetto, con un equipo formada en su casi totalidad por jugadores extranjeros, en su inmensa mayoría sudamericanos, en particular brasileños y argentinos.
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