Los agricultores de Bélgica llevaban dos días de protesta por la caída de los precios de la leche en Europa. La manifestación de los “1.000 tractores a Bruselas”, organizada por la Asociación Láctea Europea (EMB, por su sigla en inglés) amenazaba el tráfico de la capital belga y llegaba hasta las puertas del Parlamento Europeo.
Los ruralistas lanzaron chorros de leche a los agentes policiales como parte de las protestas contras las políticas agrícolas de la Unión Europea. Además de los tractores, utilizaron muñecos de vacas que llevaran sus reclamos a los políticos del bloque.
El precio de la leche ha caído debido a la superproducción en la región.
Además, derramaron leche en los campos de cultivo.
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