En el primer tiempo Estudiantes fue más que los locales, manejando la pelota a través de Verón y Benítez, quienes no encontraron la misma sintonía en sus hombres de puntas, muchas veces muy retrasados, y por eso ese dominio del juego no se pudo plasmar en el resultado.
Es que una de las virtudes de este equipo de Sensini es la capacidad de ataque, pero pese a manejar la pelota en la etapa inicial prácticamente no creó situaciones de gol.
Claro, que tampoco los platenses sufrieron en la primera etapa, debido a que recién sobre el final Andujar pasó algún que otro sobresalto menor y por eso los dos equipos se fueron al descanso igualando sin goles.
En la parte final los dirigidos por Bauza salieron a la cancha con más determinación, generando peligro pero fallando en el toque final, hasta que Guerrón, en una buena jugada individual, dejando rivales por el camino por el sector derecho del ataque de Liga, entró al área y sacó un potente remate para vencer el esfuerzo de Andujar y poner el partido 1-0.
Con el gol los ecuatorianos se tranquilizaron, pero siguieron equivocando los caminos a la hora de atacar y por eso Estudiantes se dedicó a dejar pasar los minutos, teniendo en cuenta que el 1-0 en contra no era un mal resultado.
Pero cuando el partido ya no daba para más, los argentinos comenzaron a sentir el cansancio, se refugiaron muy cerca de su arquero, algo que provocó que llegara el segundo gol de Liga, marcado por el argentino Manso (el ex Newell’s e Independiente, entre otros), quien aprovechó dentro del área una pifia de Verón para establecer el 2-0, que sería el resultado final.