Una brigada del grupo especial de búsqueda y rescate de la Policía de Tierra del Fuego retomó las tareas de búsqueda del abogado Elio Torres, quien desapareciera en la zona de Península Mitre en julio del año pasado. Así lo confirmó en ((La 97)) Radio Fueguina el comisario de la ciudad de Tolhuin, Raúl Bustamante, quien brindó detalles acerca del operativo que involucra el uso de cuatriciclos, dada la complejidad del terreno y las características geográficas de la región.
Según Bustamante, la última operación de búsqueda se había realizado en marzo de este año, cuando un grupo de rescatistas de las tres ciudades fueguinas, junto a un oficial retirado con experiencia en la zona, llevó a cabo un rastrillaje durante varias semanas. En esa oportunidad, el equipo comenzó su trayecto desde el sur hacia el norte, siguiendo una ruta inversa a la que habría tomado Torres. A pesar de los esfuerzos, no se encontraron nuevos indicios que pudieran arrojar luz sobre el paradero del abogado. «En esa oportunidad no surge ningún elemento nuevo», explicó el comisario, agregando que las condiciones climáticas adversas y el terreno dificultaron la continuidad del operativo, lo que llevó a su suspensión temporal.
Ahora, con las condiciones mejoradas, un grupo integrado exclusivamente por personal del grupo especial de búsqueda y rescate de la zona centro ha reiniciado el rastrillaje. «Ha iniciado el trabajo de rastrillaje un grupo integrado exclusivamente por numerarios del grupo especial de búsqueda y rescate», destacó Bustamante, señalando la importancia de este nuevo intento por localizar a Torres, quien se perdió en una región conocida por su difícil acceso y sus retos naturales.
La zona de península Mitre presenta importantes desafíos para cualquier operación de búsqueda. Bustamante detalló que la travesía comienza en la desembocadura del río Irigoyen, en el extremo norte de la península, y que el equipo debe avanzar por una franja costera cuando la marea lo permite. «Únicamente se puede hacer ese cruce cuando está baja la marea, porque de un lado le quedan los riscos y del otro lado el mar», explicó, subrayando la estrecha ventana de tiempo disponible para cruzar varios kilómetros de costa.
Para facilitar la búsqueda, esta vez se emplearán cuatriciclos, ya que intentos previos de utilizar vehículos 4×4 no dieron buenos resultados debido a las condiciones del terreno. «Van a ir con cuatriciclos de la institución, que es el vehículo más apto», afirmó Bustamante. A pesar de que los caballos también resultan útiles en esta clase de operativos, la gran extensión del territorio hace que depender exclusivamente de ellos sea poco práctico. Además, el terreno accidentado y las distancias a cubrir obligan a realizar un cuidadoso trabajo logístico para asegurar que el equipo de búsqueda esté bien abastecido y preparado para una travesía que podría extenderse por varios días.
El operativo actual fue ordenado por el juzgado a cargo de la investigación, que ha instruido a la policía a agotar todas las instancias posibles en la búsqueda de Torres. «El juzgado es quien encargó la investigación en la etapa judicial», explicó Bustamante, aclarando que las tareas de localización continuarán hasta que la justicia determine lo contrario o surja alguna nueva pista que permita esclarecer los hechos.
El equipo de búsqueda cuenta con equipamiento especializado, incluidos teléfonos satelitales y equipos de radio de largo alcance, preparados por la división de comunicaciones de Ushuaia. Además, se implementan estrictos protocolos de trabajo que incluyen al menos dos comunicaciones diarias para informar sobre el avance de la operación y cualquier eventualidad que pudiera comprometer la seguridad del personal, como lesiones o enfermedades.
La búsqueda de Torres ha sido complicada desde el principio por la geografía de la región, que solo es accesible mediante travesías a pie, a caballo, en cuatriciclo o, en casos de emergencia, por vía aérea. El comisario Bustamante resaltó que el simple hecho de llegar hasta el lugar donde se perdió el contacto con Torres ya implica varios días de viaje. «La única forma de llegar es vía aérea en forma urgente o rápida. Si no, son varios días a pie, en cuatriciclo o a caballo», señaló.
Un aspecto particular de la búsqueda ha sido la revisión de los refugios distribuidos en la zona, muchos de los cuales fueron construidos por trabajadores rurales o caminantes que recorren la región. Durante los primeros días del operativo, se encontraron indicios de que Torres podría haber pasado por uno de estos refugios, aunque la autenticidad de estos rastros está siendo evaluada por la justicia. Bustamante mencionó que «en alguna oportunidad surgió un escrito que podría llegar a indicar la presencia de Torres en un refugio cercano», pero subrayó que esto aún está bajo investigación y sujeto a peritajes caligráficos.
El reinicio de la búsqueda de Elio Torres marca un nuevo esfuerzo por resolver el misterio de su desaparición en uno de los lugares más remotos de Tierra del Fuego. Con una logística planificada y el uso de tecnología y vehículos adaptados al terreno, las autoridades esperan que este nuevo intento pueda finalmente arrojar luz sobre el destino del abogado.
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