Publicado en
Déficit de OSEF

Más voces de rechazo al aumento del aporte de los trabajadores

El director por los activos de OSEF rechazó de plano la propuesta de los legisladores de La Libertad Avanza de incrementar el aporte de los trabajadores para corregir el cuantioso déficit de la obra social.

El rechazo a la propuesta de aumentar el aporte de los trabajadores a la Obra Social del Estado Fueguino (OSEF) viene ganando más voces, como la del director por el sector de los activos de la institución, Franco Tomasevich, quien por ((La 97)) Radio Fueguina expresó su firme oposición a la iniciativa impulsada por los legisladores de La Libertad Avanza, Agustín Coto y Natalia Gracianía.

La medida, que busca corregir el déficit financiero de la institución mediante un incremento en el aporte de los empleados públicos, generó una fuerte reacción por parte de Tomasevich, quien sostuvo que no se puede seguir afectando a los trabajadores sin antes haber generado un aumento salarial correspondiente.

El director por los activos, quien además se desempeña como secretario gremial del SUTEF en Río Grande, expresó su malestar con la propuesta, señalando que el déficit de la obra social no puede solucionarse «castigando siempre al mismo», en referencia a los trabajadores. «Si no aumentaron los salarios, por lo tanto, no aumentaron los recursos a OSEF, ahora tenemos inconvenientes financieros y vamos a castigar siempre al mismo, o sea, siempre el bolsillo de los trabajadores, cuando no le diste incremento y por eso no aumentaron los aportes», afirmó.

En su argumentación, subrayó la situación económica de los docentes, indicando que un trabajador que percibe un salario de 750 mil pesos ya enfrenta grandes dificultades para cubrir sus necesidades básicas, como el alquiler, los alimentos y los servicios, que han experimentado aumentos significativos sin un tope que los regule. «Si se busca en ese salario solventar a OSEF, claramente en el incremento que hay, otra vez le toca la posibilidad de poder pagar alquileres, que tampoco tienen tope, así como no tienen tope los medicamentos, los insumos, las prótesis y los prestadores», detalló, enfatizando la presión que este tipo de medidas pone sobre los asalariados.

El dirigente gremial fue contundente al señalar que cualquier ajuste que se intente realizar en la obra social debería estar directamente relacionado con los incrementos salariales. «De ninguna manera. Si no se dieron incrementos, tiene que haber un financiamiento de la obra social en concepto de esos incrementos que no se dieron», expresó, insistiendo en que los trabajadores no deben ser los que carguen con el costo de un déficit que no está bajo su control.

Tomasevich también mencionó la contradicción existente en las narrativas sobre los docentes y sus reclamos salariales. Según explicó, si bien los docentes han logrado incrementos, estos no han sido suficientes para cubrir la creciente inflación, y aún menos para sustentar la financiación de la OSEF. «El último incremento del salario fue de alrededor de un 47%, estábamos en $ 500.000 y llevamos a $ 750.000», recordó, pero agregó que ese aumento no refleja la necesidad real de los trabajadores, quienes siguen viendo cómo sus salarios pierden poder adquisitivo frente a la suba de precios.

Para el representante de los activos, la clave está en que el Estado, y no los empleados, asuma la responsabilidad de garantizar el financiamiento de la obra social. «En todo caso esos incrementos salariales no se dieron por acuerdo con los sindicatos o no, cómo vamos a solventar a OSEF que no sea metiéndole la mano en el bolsillo al trabajador», cuestionó.

En cambio, propuso que cada vez que los incrementos salariales queden por debajo de la inflación, debería existir una retribución adicional a la obra social por parte del Estado para compensar el desfasaje. «Acá no estamos hablando de 20 caramelos, sino que estamos hablando de prestaciones médicas y de medicamentos que son de necesidad vital», insistió.

El rechazo de Franco Tomasevich a la propuesta de los legisladores libertarios refleja una preocupación más amplia en torno a la sostenibilidad del sistema de salud estatal, y pone en evidencia la tensión existente entre las necesidades de los trabajadores y las medidas fiscales que buscan paliar el déficit de OSEF. Para el director por los activos, la solución pasa por un «aporte extraordinario del Estado en concepto de los aumentos salariales que no se dieron», en lugar de recurrir a nuevos esfuerzos económicos por parte de los trabajadores.

La discusión en torno al financiamiento de OSEF sigue abierta, pero lo que queda claro es que cualquier solución que implique aumentar los aportes de los trabajadores será rechazada, al considerar que las condiciones salariales no han mejorado lo suficiente como para justificar una mayor contribución por parte de los empleados públicos.

Comentarios