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Bogado propone reutilizar el cabello que descartan peluquerías y barberías

El concejal de Provincia Grande describió un novedoso proyecto para regular la recolección de cabello que descartan peluquerías y barberías, material con el cual se pueden realizar diferentes tipos de acciones útiles y amigables con el ambiente.

El concejal de Río Grande, Jonathan Bogado, del partido Provincia Grande, dio a conocer un innovador proyecto que busca regular la recolección y reutilización del cabello que se descarta en peluquerías y barberías de la ciudad.

La iniciativa surge en respuesta a una inquietud planteada por un grupo de barberos que se acercaron al Concejo Deliberante para discutir el destino del cabello desechado. Estos profesionales sugirieron que el cabello podría tener una segunda vida en lugar de ser simplemente barrido y arrojado a la basura.

«En una de las charlas que venimos teniendo con diferentes instituciones, un grupo de barberos que se habían acercado al Concejo nos habían comentado que se podía empezar a utilizar el descarte del pelo de peluquerías y barberías, para realizar algunos productos específicos», explicó Bogado al presentar su propuesta en ((La97)) Radio Fueguina. Esta idea ha sido recibida con interés debido a su potencial para reducir la contaminación y crear productos útiles a partir de lo que hasta ahora era considerado un residuo sin valor.

El edil detalló que el cabello desechado podría emplearse en diversas aplicaciones ambientales. En primer lugar, mencionó su uso en la fabricación de barreras para la contención de derrames petroleros. «Entramos en contacto con una empresa en la ciudad de Buenos Aires que nos contó su experiencia respecto de este proyecto que ellos están realizando ya hace un par de años, justamente la reutilización de los pelos de descarte de peluquerías y barberías para la fabricación de diversos productos que se están utilizando principalmente en las áreas petroleras o con hidroeléctricas, que se usa para la recolección de derrames petroleros de aceite», señaló. El proceso consiste en convertir el cabello en una especie de tejido tubular que se coloca en cuerpos de agua para absorber el petróleo y prevenir la propagación de la contaminación.

Concejal de Río Grande, Jonathan Bogado.

Otro uso potencial del cabello reciclado es en la agricultura, particularmente en la producción agroecológica, donde podría ayudar a conservar el agua en las plantaciones. «Se está usando también para la producción agroecológica para el ahorro del recurso hídrico, en plantaciones públicas, que pueden ser, por ejemplo, el vivero municipal o árboles», explicó el concejal. Esta técnica, según Bogado, ese especialmente útil en cultivos que requieren grandes cantidades de agua, como el arándano, ya que los filtros hechos con cabello permiten reducir el consumo de agua hasta en un 60%.

Bogado también destacó un posible uso relacionado con las carencias en el sistema de riego automático de la ciudad, lo que limita la capacidad para mantener una vegetación urbana adecuada. «En la ciudad no tenemos un sistema de riego automático para las plantaciones de árboles en la ciudad y es una deficiencia que tenemos en términos de la cantidad de árboles», afirmó. El uso de cabello reciclado podría, por tanto, representar una solución a este problema, facilitando la conservación del recurso hídrico y mejorando la sostenibilidad del arbolado urbano.

El proyecto cuenta con la colaboración de Mot Argentina, una cooperativa de trabajo especializada en la recolección y tratamiento del cabello. Esta cooperativa no solo recoge el material, sino que también lo procesa y lo convierte en productos finales que luego se distribuyen y venden. «Se puede generar bastante actividad alrededor de esto, pero principalmente nos parecía interesante», destacó Bogado, refiriéndose al potencial económico y social de la iniciativa.

Además de los beneficios ambientales y económicos, el concejal subrayó la importancia de involucrar a los jóvenes en este tipo de proyectos. Bogado relató una reciente reunión con estudiantes de la Misión Salesiana, quienes están trabajando en un proyecto de compostaje. Según él, «hay una agenda muy interesante climática y de medio ambiente en las juventudes, que es en definitiva un sector social, un sujeto político en el cual me estoy involucrando y tratando un poco de representar esos intereses y esa agenda que por ahí queda olvidada a veces, o postergada».

En conclusión, el proyecto propuesto por el concejal Jonathan Bogado busca no solo abordar problemas ambientales mediante la reutilización del cabello desechado, sino también fomentar la participación de diferentes sectores de la sociedad en la construcción de una ciudad más inclusiva y sostenible. «Animémonos a pensar una sociedad donde todos los sujetos estemos incluidos, desde los recién nacidos, las infancias, las juventudes, los adultos y los adultos mayores. Todos componemos la sociedad y tenemos que tener una sociedad que nos albergue a todos, absolutamente», concluyó, reflejando su visión de una comunidad integrada y comprometida con el bienestar común.

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