En un contexto de inflación explosiva, especulación y una dispersión de precios calamitosa en muchos casos, comparar valores es una necesidad imperiosa para el consumidor que muy a menudo se siente estafado por pagar “lo que no vale” el producto que adquiere.
El viejo aforismo “caminen señoras, caminen” (nacido en un noticiero de la TV) invitaba a recorrer comercios para encontrar el precio más ventajoso y ahorrar en consecuencia en los gastos cotidianos.
Más de 30 años después, tecnología mediante, el viejo “caminen, caminen” podría equivaler a “naveguen, naveguen” en la web para conocer precios y tarifas, y zafar de los comercios que cobran de más, solo por su afán de ganar más de lo razonable.
Pero, claro, no todos los precios están en la web, y a alguien se le ocurrió impulsar su publicación y reunirlos todos en un solo sitio, accesible a cualquier consumidor. Sin gastar en recorridas kilómétricas, el sistema (una aplicación desarrollada para móviles y computadoras) permitiría tener todos los valores comparables en una tabla y tomar nota para salir a hacer las compras, ahora sí, en el comercio más económico.
Detalles más, detalles menos, así nació la idea del Observatorio de Precios, que el gobierno de la Provincia encomendó a una consultora privada, la que después de meses de trabajo, presentará hoy en el Salón Yaganes, en la ciudad de Río Grande.
Conforme al plan trazado, la consultora local Neodelfos llevó a cabo el desarrollo tecnológico, el que se materializará en conjunto con la logística gubernamental. Con el fin expresado: visibilizar los precios en tiempo real, disponibles en una página web de libre acceso.
Por ahora, el observatorio se centrará en la canasta básica de alimentos. Con el tiempo se extenderá a muchos otros rubros y más comercios que los relevados en esta primera etapa.
Es, en definitiva, una fuerte apuesta tecnológica con sello cien por ciento fueguino, que podría tener repercusión a nivel nacional si los resultados son los que esperan sus creadores.
“Neodelfos realizó un desarrollo tecnológico que podría dar luz sobre la brecha de precios en un contexto de fuerte inflación, lo que implica individualizar posibles esquemas de precios basados en la especulación y al mismo tiempo brindar una herramienta ágil para los consumidores que buscan optimizar su capacidad de consumo frente al avance de la inflación”, explican sus impulsores.
Idea, gestación y presentación
En los estudios de ((La 97)) Radio Fueguina, el titular de la consultora Neodelfos, Leonardo Pérez Bustos, relató cómo se fue gestando el desarrollo de esta herramienta tecnológica, remontándose al año pasado donde pudo observar que el operativo del IPC (índice de precios al consumidor) relevado por el INDEC podría estar sufriendo un retraso en la muestra de sus datos producto de la aceleración del proceso inflacionario.
Basado en ello, desde Neodelfos se propusieron “diseñar una herramienta que permita desde un dispositivo móvil poder escanear el código de barras de los productos a observar y al mismo tiempo registrar el precio de esos productos, enviando la información al instante y en tiempo real a una base de datos”, reseñó Pérez Bustos
Este fue el desarrollo que le permitió posteriormente a Neodelfos diseñar el proceso de visualización dinámica de los productos relevados en una página web de libre acceso, con el propósito de permitirles a los consumidores conocer el precio más económico del producto de interés y el lugar donde puede adquirirlo.
Pérez Bustos destacó el acompañamiento del gobierno provincial en la figura del gobernador Gustavo Melella, de Analía Cubino y su equipo de trabajo, quien está al frente de la Agencia de Innovación tecnológica, Federico Giménez a cargo de la secretaria de representación política quien aporta todo el esfuerzo logístico necesario para poder desplegar el operativo de registro diario del Observatorio de Precios, el ministerio de economía y la secretaria de Comercio quienes aportan su conocimiento en el desarrollo operativo de la herramienta.
Cómo funciona la aplicación
El diseño de la página web permitirá acceder a los datos relevados de 42 comercios de la ciudad de Río Grande, en relación a 498 productos de la canasta básica de alimentos que se irá incrementando a lo largo del tiempo.
“Está pensada para que sea amigable con el usuario, de fácil navegabilidad con característica tipo resposive, que implica una adaptación automática a cualquier tipo de pantalla”, explicó el consultor.
Al ser una página web es de libre acceso y universal, esto implica que se puede ingresar desde cualquier dispositivo que tenga acceso a internet.
Por otro lado, el usuario podrá apreciar e individualizar fácilmente los productos expuestos en la página web, que cuenta con una serie de filtros que el usuario puede utilizar, tales como por tipo de producto o por comercio.
Una vez individualizado y seleccionado un producto, el usuario podrá ingresar en el mismo y observar en la distribución de comercios que disponen de ese producto ordenados de forma ascendente, con el precio más económico dispuesto en el borde superior y desde allí seguir el orden ascendente en cuanto a precios hacia el borde inferior de la página web.
Este orden en cuanto a la disposición de precios y comercios hace que la página web tenga una característica dinámica, ejecutando ese mismo orden en todos los casos planteados en lo sucesivo.
Por otro lado, y desde el punto de vista técnico, la infraestructura utilizada para este proyecto es auto escalable, según demanda para mejorar performance y experiencia de usuario en cuanto a tiempos de respuesta.
Si el consumidor vive espantado con el alza de los precios, se espera que el Observatorio de Precios le permita encontrar el más accesible en cada caso y comprar donde más le convenga.
La expectativa de máxima (aunque los desarrolladores y el gobierno prefieren no explicarlo de este modo) es que los comerciantes inescrupulosos, sintiéndose observados, reduzcan su tendencia a poner el mayor precio posible, amparados en una dinámica inflacionaria que le impide al comprador estimar cuál es el precio real (al menos en ese momento) del producto que desea adquirir.
¿Será un arma más o menos poderosa para ahorrar en las compras diarias? Las conclusiones estarán a la vista a medida que el sistema recorra su camino, que los ciudadanos acudan a él y que realmente decidan en función de la información que reciben.
La logística puesta en juego no es menor, la eficacia de la aplicación depende de que el relevamiento (que se lleva a cabo recorriendo comercio por comercio casi a diario) sea tan dinámico como la suba de precios.
Muchas de las dudas quedarán despejadas hoy, a partir de las 10 horas, cuando se presente el novedoso desarrollo tecnológico en los salones del edifico Yaganes. La expectativa es mucha. Ojalá los resultados digan que es justificada.
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