En coincidencia con el 41° aniversario del comienzo de la guerra de Malvinas ocurrida en 1982, vio la luz una vergonzosa publicación hecha por un ex oficial combatiente jactándose en redes sociales de estar torturando a un soldado argentino en las islas en pleno conflicto.
La foto del capitán retirado del ejército Eduardo Dalmedo junto al cabo primero Juan Carlos Cabrera, ambos sonrientes sumergiendo la cabeza de un soldado en un curso de agua helado de Malvinas, constituye en sí misma una prueba irrefutable de las numerosas denuncias por torturas y vejámenes contra nuestros propios soldados presentadas contra oficiales de las Fuerzas Armadas argentinas, y que la Justicia no atina. por acción u omisión, darles el curso que tan graves actos merecen.
La publicación apareció replicada este 2 de abril en el portal Agenda Malvinas, que dirige el periodista y ex combatiente Daniel Guzmán de la ciudad de Ushuaia. El posteo en Facebook data del 3 de septiembre del 2014, donde Dalmedo publica una especie de juego de acertijo, y consulta a sus amistades si alguien puede identificar “a quién estamos por sumergir en el espejo de agua, pero seguramente alguna macana se había mandado”. Y promete pagar una cerveza a quien logre develar la incógnita.
En el total colmo de la impunidad, el militar cierra su posteo con una frase tenebrosa. Admite que esas prácticas eran “momentos de desenchufe que nos permitía seguir adelante”.
La publicación se viralizó y recorrió los portales de medio país generando invariablemente sentimientos de indignación y repudio.
En las últimas horas Dalmedo, que vive en Comodoro Rivadavia, donde es conspicuo integrante del Rotary Club, atinó una defensa en los comentarios del posteo, donde consigna: «En esta foto, como le expliqué en su momento a Marcelo, estamos sosteniendo al que está tomando muestras de agua, para verificar con el bioquímico, si era potable». Todo lo demás lo adjudica a obra «la prensa amarillista (que) no descansa, y busca solo hacer daño, no informar objetivamente», mientras anticipa que publicará pronto un libro, donde incluirá la foto de la que se enorgullece.
((La 97)) Radio Fueguina consultó al abogado del Centro de Ex Combatientes de Malvinas de La Plata, CECIM, el Dr. Jerónimo Iraola, en tanto es esa agrupación la que más ha impulsado las denuncias por estos gravísimos delitos cometidos por los jerarcas de la dictadura militar en Malvinas contra jóvenes soldados sin instrucción militar, sin pertrechos, sin conducción.
Iraola dio cuenta que obran el Juzgado Federal de Río Grande más de 120 declaraciones del tipo de las difundidas por el torturador, en el marco del expediente 1777 del año 2007, “que hoy duerme una siesta incomprensible en el Juzgado” tal como apreció.
Consideró que la foto “es gravísima, metaforiza la injusticia, la impunidad, habilita que los victimarios, los militares, los miembros de las fuerzas armadas, puedan seguir jactándose, haciendo chistes, publicando cuestiones que para el derecho internacional y los derechos humanos son tortura”.
El letrado informó asimismo que el famoso submarino al que están sometiendo a un soldado en la foto, no era en realidad la modalidad más habitual utilizada por estos psicópatas: “la práctica más difundida es el estaqueamiento” consignó, consistente en dejar atado por horas y horas a una estaca a un soldado a la intemperie con temperaturas bajo cero como método de castigo.
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