Quedan apenas cuatro días para que suene la campana del Juzgado Electoral y venzan los plazos para la conformación de alianzas en la provincia de Tierra del Fuego, con vistas a los comicios del próximo 14 de mayo.
Y a pesar de que las conversaciones y negociaciones por estas horas son febriles, ya hay una certeza: cómo estará conformando el frente electoral que diseña el melellismo junto a los intendentes para quedarse con todo.
El Gobernador logró imponer su idea del frente amplio, con al menos cinco partidos, frente a la primigenia posición que apuntaba a que solo 3 espacios lo conformen, en una situación que Melella presagiaba podía dejarlo «en inferioridad de condiciones».
Así las cosas, si nadie patea el tablero en las próximas horas (bien vale dejar la puerta abierta para ello, si se tiene en cuenta lo ocurrido con Juntos por el Cambio), los partidos que representan a cada uno de los intendentes, FORJA y un viejo aliado de este serán las cinco patas sobre las que se asentará el sueño de la reelección -para todos-.
Los pejotistas
El intendente de Ushuaia, Walter Vuoto, aportará la estructura del Partido Justicialista oficial para la alianza que aún no tiene nombre: ya recibió el visto bueno de sus consejeros para que el peronismo pueda generar este frente electoral.
Martín Pérez hará lo propio con el partido Provincia Grande, que lo tiene como conductor y que nuclea sobre todo a disidentes de los viejos modos del PJ y cobija a los nuevos militantes, más cercanos a las ideas de Néstor y Cristina.
Daniel Harrington, de Tolhuin, buscará aportar votos para la alianza a través de Nuevo País, el espacio que lidera el exgobernador (o gobernador mandato cumplido, como le gusta que lo llamen) Juan Carlos Arcando.
FORJA
En 2019 Gustavo Melella se presentó a la gobernación a través de la alianza denominada Concertación FORJA, que contaba con aliados pero que hacía del melellismo más puro su principal ariete.
Sabedor de que los tiempos son otros y poniendo por encima la idea de unidad que pregona desde hace años, el actual gobernador invocó el frentismo y dejó atrás las rencillas con Pérez primero y Vuoto después.
La ¿sorpresa?
Nadie desconoce, por más que les pese a algunos, que la alianza de cuatro es impracticable y que hay que contener a los dirigentes del tradicional Movimiento Popular Fueguino.
Lo sabe Melella, que se llevó a Mónica Urquiza en 2019 para que sea su compañera de fórmula y lo sabe también Vuoto, que en su discurso de apertura de sesiones llenó de elogios a la figura más fuerte que tienen los mopofistas: Damián «Loly» Löffler.
Un frente, por ahora, sin nombre
Melella no solo llevó a la mesa de negociaciones una exigencia, la antes mencionada de generar un frente amplio, sino que también demandó que la alianza lleve un nombre nuevo.
Ni Frente de Todos ni Frente de Pocos, tampoco nada de Frente Para la Victoria o sus derivaciones. Eso señalan colaboradores del Gobernador a ((La 97)) Radio Fueguina al ser consultados por el nombre de un frente que tiene a sus integrantes definidos, pero que aún no fue bautizado.
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