Pero ahora que parece que se han librado de ese lastre de 28 años sin títulos mostrando la mejor versión de la selección, y con los 35 partidos invictos en sus espaldas, Lionel Messi, el flamante capitán, ha hecho soñar a todos con poder levantar la copa este año. No en vano Argentina parte como una selección favorita tal y como recogen la totalidad de las apuestas online.
Sería el tercer título mundial del conjunto Albiceleste, y parte de ese sueño es estar en la cancha el 18 de diciembre en el espectacular estadio Lusail de Doha para disputar la tan ansiada final. Así lo ha comentado el astro argentino:
“No sé si somos grandes candidatos, pero creo que Argentina es candidata siempre por historia, por lo que significa y más ahora por cómo llegamos”.
Messi, que a los 35 años jugará el quinto y último campeonato mundial de su carrera, ha enfatizado el buen trabajo realizado con una frase:
“Llegamos en un buen momento con un grupo armado y muy fuerte”.
Los ahora apodados como La Scaloneta, que están bajo el mando de Lionel Scaloni, comenzaron a crear la esperanza luego de vencer a Brasil en la Copa América de 2021, y los más jóvenes son los que más han disfrutado el triunfo. Recordemos que antes de eso, habían tenido puros descalabros en cuanto a resultados se refiere, por lo menos los importantes.
Ese triunfo en el Maracaná ha sido el inicio de una locura en cuanto a lo que se espera de la selección argentina, y esto pudiera ser un arma de doble filo, puesto que sabemos que, en un Mundial, cualquier cosa puede pasar.
Tanta es la expectativa, que incluso los cromos del álbum de Panini son imposibles de conseguir y, como lo comentamos al inicio, el gobierno tuvo que hacer una intervención para solicitar a la empresa que se imprimiesen más, o que tuvieran mayor disponibilidad.
Es necesario recordar que la Albiceleste posee dos campeonatos, conseguidos en lo que muchos claman fue la época dorada del fútbol argentino. El primero fue en 1978, y el segundo en 1986 en México, uno de sus rivales en la fase de grupos del Grupo C. La última vez que llegaron a instancias finales fue en 2014.
Nada de esto que se vive ahora sería posible sin el éxito del director técnico. Scaloni, cuando asumió el timón hace cuatro años y sin experiencia alguna más que la de dirigir a pequeños en Mallorca, aunque sí formó parte del cuerpo técnico de Jorge Sampaoli en Sevilla, ha sorprendido a propios y extraños.
En sus manos, la albiceleste le ganó a Brasil 1-0 la Copa América, luego de casi 30 años. Llegamos a julio de este año y el récord de victorias de Argentina se rompió al golear 3-0 a Italia en la llamada Finalissima, que es el partido entre campeones continentales que se disputó en el magnífico estadio de Wembley, en Londres.
Dándole cabida a nuevos talentos, como el arquero Emiliano Martínez, o los volantes Rodrigo De Paul y Leandro Paredes, además del zaguero Cristian Romero, revolucionó un poco el partido y comprometió a los veteranos jugadores a estar abiertos a las nuevas formas de trabajo.
El truco del joven estratega de 44 años fue romper con la dependencia de Messi, generando así sentido de pertenencia en todos los jugadores. Ahora, Argentina presiona hasta asfixiar, incluyendo a Messi, pero también ha mejorado su efectividad porque no ha estado debajo del marcador desde el 2020 y entre Lionel y Lautaro Martínez suman más de 45 goles. Así lo ha comentado:
“Hoy no hay selección que domine 70, 80% del partido. Hay momentos en los que hay que atrincherarse, trabajar, sentir que estamos en dificultad. Lo bueno de este equipo es que sabe sufrir”.
Es de esta manera como la estrella del conjunto ha podido brillar con luz propia, haciendo lo que sabe con mayor libertad, pero, sobre todo, con mucho menos presión sobre sus hombros. Todos están listos y el objetivo no es otro que traer la Copa Jules Rimet a casa.
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