El partido se jugó en el estadio Centenario, de Montevideo, donde hubo disturbios entre hinchas argentinos y uruguayos, con un buen arbitraje del paraguayo Carlos Torres.< ?xml:namespace prefix = o ns = "urn:schemas-microsoft-com:office:office" />
El desquite entre Boca y Defensor Sporting se jugará ayer que viene, en La Bombonera, y el equipo argentino ganando y empatando sin goles o 1 a 1, le alcanzará para avanzar a los cuartos de final del certamen continental.
Boca jugó mal, tuvo un primer tiempo para el olvido, pero pese a eso estuvo dos veces arriba en el marcador y estuvo muy cerca de ganar.
Boca llegó a Montevideo con todas sus dudas a cuestas, por el mal presente en el torneo Clausura y porque en la Copa Libertadores, salvo en algunos momentos, no logró en este semestre tener grandes rendimientos.
Encima sigue sin poder contar con Juan Román Riquelme y en esta instancia de la Copa Libertadores, donde es a todo o nada, una ausencia así puede ser clave.
Pero con todo en contra, por su presente, se encontró en el mítico estadio Centenario ganando 1 a 0 a los dos minutos del primer tiempo, gracias al oportunismo de Palermo, quien luego de un corner se anticipó arrojándose al piso y desde una posición muy incómoda mandó la pelota al fondo de la red.
En ese momento parecía que surgía la “mística copera” de este Boca, ganando en Uruguay y comenzando a definir una serie complicada.
Sin embargo, teniendo en cuenta los partidos del certamen local y los de la Copa Libertadores, estos deben haber sido los peores 45 minutos de Boca en lo que va del año.
Los volantes desconectados de los delanteros. Sebastián Battaglia sin recuperar, Fabián Vargas sin distribuir, Nicolás Gaitán y Cristian Chávez sin crear, un insulso Rodrigo Palacio y un solitario Palermo fueron la postal de los dirigidos por Carlos Ischia.
Pese a todo esto, sin atacar, sin generar peligro, cada vez que el equipo de la ribera cruzaba la mitad de cancha insinuaba que podía aumentar el marcador, pero carecía de presencia ofensiva y de juego.
El conjunto del “Polilla” Da Silva, sin mucho, empujando, le generó problemas al fondo de Boca, que sigue dejando grietas, dando dudas, como también el arquero Roberto Abbondanzieri.
Con este panorama, lo mejor que le podía pasar a Boca era que finalizaran los primeros 45 minutos rápidamente, porque la ventaja era sólo en el resultado pero no en el juego.
Las caras del banco de suplentes de Boca lo decían todo, si hasta se asombraron más con el mal rendimiento del equipo que por el intercambio de piedras que hubo durante el primer tiempo entre hinchas de Defensor y Boca.
Sobre el final del primer tiempo el conjunto local llegó al empate, a través de Gaglianone, a quien prácticamente le rebotó una pelota para irse así al fondo de la red luego de un mal rechazo del paraguayo Julio César Cáceres.
Muchos apostaban a ver un equipo argentino en el segundo tiempo, pero Defensor tardó 50 segundos en poner un jugador cara a cara con Abbondanzieri, que fue un ex Boca, Julio Marchant, quien definió bien pero Morel Rodríguez salvó cuando la pelota se metía dentro del arco.
Pero otra vez Boca, sin merecerlo, se puso arriba en el marcador, en un tanto que tuvo mucho de fortuna, porque Palermo quiso rematar y le pifió al balón, con tanta suerte que la pelota le quedó servida a Palacio para establecer el 2 a 1.
Esta vez la ventaja Boca se tranquilizó, sus volantes comenzaron a manejar la pelota, los uruguayos se empezaron a desesperar y de la mano de Palermo, quien tuvo un par de chances para aumentar el marcador, se consolidó en el estadio Centenario.
Con el correr de los minutos todo parecía indicar que nada haría peligrar la victoria de Boca, pero una desatención defensiva, que comenzó en un lateral para los uruguayos, encontró a todos dormidos en el fondo xeneize y Mora, sin oposición, de cabeza estableció el 2-2 final.
Más allá de la amargura porque el partido parecía ganado, este resultado no es malo para Boca, porque empatando sin goles o 1 a 1 en La Bombonera, se clasificará a los cuartos de final de la Copa Libertadores.
Síntesis
Defensor Sporting: Martín Silva (5); Pablo Pintos (5), Jorge Curbelo (5), Walter Ibáñez (5) y Sebastián Ariosa (5); Julio Marchant (6), Pablo Gaglianone (5), Miguel Amado (6) y Diego De Souza (6); Diego Vera (6) y Vila (4). DT: Jorge Da Silva.
Boca Juniors: Roberto Abbondanzieri (4); Hugo Ibarra (4), Julio César Cáceres (5), Juan Forlín (6) y Claudio Morel Rodríguez (5); Fabián Vargas (5), Sebastián Battaglia (5) y Cristian Chávez (6); Nicolás Gaitán (4); Rodrigo Palacio (4) y MARTIN PALERMO (7). DT: Carlos Ischia.
Goles en el primer tiempo: 2’ Palermo (BJ) y 45’ Gaglianone (DS).
Goles en el segundo tiempo: 11’ Palacio (BJ) y 38’ Mora (DS).
Cambios en el segundo tiempo: en el inicio Alvaro Navarro (5) por Vila (DS), 23’ Rodrigo Mora por Ariosa (DS), 32’ Lucas Viatri por Palacio (BJ) y Juan Krupoviesa por Gaitán (BJ), 37’ Julio García por Marchant (DS) y 40’ Facundo Roncaglia por Ibarra (BJ).
Arbitro: Carlos Torres (Paraguay).
Estadio: Centenario, de Montevideo.