La integrante de Alianza Libre de Humo de Tabaco Argentina (ALIAR), Patricia Crocci, informó que se registró un aumento de las adicciones, según datos oficiales. “El Sedronar nos acaba de informar que las adicciones se han incrementado en un 20% por el encierro, debido a la pandemia”, remarcó la referente.
En declaraciones a ((La 97)) Radio Fueguina, Crocci explicó que “fundamentalmente, se da en el caso de las dos selecciones legales más comunes y más económicas, como son en la Argentina el alcohol y la adicción a la nicotina, ya sea vía cigarrillo común, o vapeadores, o tabaco para armar, o cigarrillo electrónico, o pipa de agua”.
“Todos estos productos de la industria tabacalera, todos contienen nicotina y la industria tabacalera es la única responsable de esta epidemia -dijo Crocci-. Caer en una adicción a las drogas trae consecuencias negativas para todo el organismo, pero principalmente para el cerebro, porque una persona es adicta cuando se desarrolla una dependencia psicológica, una conducta repetitiva y compulsiva con respecto al uso de una sustancia estimulante, como en este caso la nicotina, y hay además tolerancia, esto significa que cada vez se necesita más cantidad de droga para la misma satisfacción, por esto el consumo de cigarrillos siempre va en aumento”.
En diálogo con Marita Romero, durante el programa radial “Un Gran Día”, Crocci brindó las precisiones científicas sobre esta adicción: “La nicotina aumenta la producción de neurotransmisores, por lo que se producen efectos conductuales que facilitan la regulación del humor, la euforia, la sensación de poder; el fumador se mantiene más tiempo en vigilia porque más afecta el sueño y disminuye el apetito, por lo que se utilizo muchísimo el cigarrillo en las dos guerras mundiales, sobre todo con los alemanes; y además se utiliza con los estudiantes para mantenerse despiertos”.
Acerca de las consecuencias para la salud, la referente advirtió que “hay daño cerebral por un efecto vasoconstrictor de los vasos más finos del cerebro, disminuyendo el aporte de oxígeno a las neuronas y se producen microinfartos cerebrales, y esto trae como consecuencia una disminución de las maravillosas funciones cerebrales”.
“La nicotina entonces es un veneno para el cerebro y la industria tabacalera tiene un menú para los niños, utiliza sabores como mango, dulce de leche, mojito, fresh, porque volver adicto al cerebro de una persona joven o adolescente es mucho más fácil”, cuestionó la integrante de ALIAR.
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