El presidente del parlamento iraní, Alí Larijani, acusó al gobierno de Estados Unidos de tratar de crear «una crisis artificial» en Medio Oriente al afirmar que Teherán estaba implicado en la planificación de una ola de atentados en Estados Unidos.
Las afirmaciones estadounidenses demuestran una «mala voluntad estúpida», afirmó Larijani ante el Parlamento. «Los estadounidenses tratan de crear una nueva crisis artificial (…) Tenemos relaciones normales con Arabia Saudita y no hay razón alguna para que Irán cometa tales actos absurdos como ellos afirman», agregó.
Las declaraciones se producen apenas unas pocas horas después de que Estados Unidos acusara al gobierno de Irán de planear atentados contra las embajadas de Arabia Saudita y de Israel en Washington, junto con el asesinato del embajador saudita en este país, en un complot que se gestó en Irán, México y Estados Unidos, y que algunos llegaron a calificar en ese país como un «acto de guerra».
Poco antes, la agencia oficial de noticias iraní dijo que el gobierno norteamericano había lanzado una nueva «campaña de propaganda» contra Irán. Un colaborador cercano a Ahmadinejad acusó a la Casa Blanca de querer «distraer» a los norteamericanos.
El plan denunciado, que comenzó a prepararse hace meses y fue desbaratado por las autoridades de Estados Unidos tras una larga investigación, también incluyó «discusiones» sobre ataques contra las embajadas de Arabia Saudita e Israel en Buenos Aires, según indicaron funcionarios federales a la cadena ABC. Sin embargo, este dato no está incluido en la información oficial difundida ayer por el gobierno de Barack Obama.
La investigación, que todavía continúa, ya derivó en una causa judicial contra dos iraníes en un tribunal de Nueva York. Ambos fueron acusados ayer de cinco delitos, entre los que sobresalen los de conspiración para asesinar a un funcionario extranjero, para cometer un acto de terrorismo, y para usar un arma de destrucción masiva.
El episodio marca un nuevo pico de tensión entre Estados Unidos e Irán , puso una vez más en alerta al país y les dio vuelo a quienes impulsan una postura mucho más dura con el régimen de Mahmoud Ahmadinejad.
Pero la trama detrás del fallido atentado difundida por el gobierno de Estados Unidos sembró, además, inquietantes interrogantes sobre la presencia de Teherán en América latina.