María estaba en su domicilio en Córdoba, acompañada solamente por su hija de 4 años, cuando se dio cuenta que el parto era inminente: nadie en la casa podía ayudarla a dar a luz a su nuevo hijo. Como último recurso, llamó al 911.
Allí tuvo la suerte de encontrar a una oficial de policía de Córdoba que se transformó, a través del teléfono –claro está–, en una partera ideal, y con ella mantuvo la emocionante conversación que quedó grabada y tomó estado público este jueves.
«Estoy teniendo a mi hijo», le dijo María con un hilo de voz. Mientras tanto, Cristina Ramírez, la oficial de policía que también es paramédica, comienza a darle indicaciones y sobre todo a tranquilizarla telefónicamente.
«Necesito saber si el bebé llora y el color que tiene. Agárrelo y póngaselo en el pecho, después necesito que le masajee la espaldita», continúa Cristina, buscando siempre la tranquilidad de la parturienta.
Además, le aclaraba que el servicio médico iba en camino y que lo importante en ese momento era «mantener calentito al bebé». Finalmente, los médicos llegaron al lugar y encontraron que madre e hijo estaban en perfectas condiciones.
«Es una historia hermosa entre tanta tristeza que estamos viviendo. Yo solamente la ayudé, ella fue la valiente en este caso», sostuvo la oficial Ramírez a medios de prensa locales.
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