El partido tuvo un denominador común durante los 90 minutos, además del que jugaron por lo general de mal a muy mal, los dos equipos quisieron hacer todo rápido, apurados para defender y apurados para atacar.< ?xml:namespace prefix = o ns = "urn:schemas-microsoft-com:office:office" />
En el primer tiempo, en el cual la pelota estuvo más tiempo por el aire que por el verde césped, Racing tuvo una leve ventaja por sobre Rosario Central porque se acercó con un poco, no mucho, más de peligro sobre el arco rival.
Franco Zuculini y Claudio Yacob por momentos fueron dueños del mediocampo, con la compañía clave para la marca de Martín Wagner.
Pero Pablo Lugüercio quedó muy solo, porque Leandro González corre pero no juega y Adrián Lucero no pudo acertar pases ni de dos metros, situación que complicaba al equipo de Avellaneda en ataque.
En el fondo Racing paró a sus centrales Lucas Aveldaño y Matías Martínez, buscando anticiparse en forma constante a los puntas de Central y por lo general lo lograron.
El equipo de Reinaldo Carlos Merlo no supo como resolver ese problema que le generó Racing, sobre todo porque sus volantes no llegaban nunca por sorpresa, sintiendo claramente la ausencia de Ezequiel González.
En cuando a situaciones Racing tuvo dos muy claras, ambas en los pies de Lugüercio y en ambas, una de cabeza y otra de tijera, el ex delantero de Estudiantes no le acertó al arco.
Por su parte, los rosarinos inquietaron a Racing con pelotas cruzadas al área y una estuvo cerca de abrir el marcador Nahuel Valentini.
Muy poco para un primer tiempo que generó muchas expectativas y en el que el medio a perder pudo más que las ganas de vencer.