(Río Grande, 23 de agosto de 2011) – El servicio de potabilización de la ciudad fueguina se vio afectado por el congelamiento de las fuentes de agua y un desperfecto en el bombeo. El abastecimiento está limitado entre tres y cinco horas diarias.
«El problema actual es el congelamiento de las fuentes de agua cruda, debido a las bajas temperaturas, sumado a un desperfecto en el sistema de bombeo», explicó José Mansilla, de la Dirección Provincial de Obras y Servicios Sanitarios (DPOSS).
Desde hace 40 días, la DPOSS realiza cortes cada noche (desde las 23 hasta las 6) que afectan a más de 30 barrios de Ushuaia y generan inconvenientes en hoteles y otros lugares turísticos.
Pero, además, la falta de caudal deriva en cortes sorpresivos durante el día que incluyen a sectores muy poblados de la ciudad y que se quedan sin agua desde el mediodía o la tarde.
La situación terminó de complicarse en las últimas 72 horas, cuando el sistema colapsó por completo y DPOSS apenas pudo garantizar el servicio entre tres y cinco horas diarias.
«El fin de semana largo fue un desastre. El caudal de ingreso descendió a 230 litros por segundo y se vaciaron todas las cisternas. El sistema no soportó y se interrumpió el servicio», añadió Mansilla.
Desde el gobierno provincial se anunció un paquete de medidas de corto y mediano plazo para sobrellevar la crisis, que incluye desde un proyecto de ley declarando la emergencia del servicio de agua potable, hasta la ejecución de obras públicas y la adquisición de equipamiento.
La gestión de la gobernadora Fabiana Ríos anunció que invertirá 17 millones de pesos en adquirir tres Plantas Potabilizadoras Modulares, a los que deben sumarse otros 2 millones para financiar obras complementarias.