Una mujer –que se moviliza en un automóvil particular- estaría recorriendo los domicilios de vecinos de Río Grande para pedir colaboración en dinero y quedándose luego con lo recaudado. La solicitud de donaciones se hace usando el nombre del Comedor de María, un merendero que desde hace muchos años presta servicios en la margen sur.
En diálogo con ((La 97)) Radio Fueguina, la responsable del Comedor de María, María González, pidió que no se hagan aportes que se soliciten invocando el nombre del merendero, en virtud de que la campaña ha sido suspendida hasta tanto se aclare la presunta estafa.
Refiriendo todo lo sucedido, María recordó que, frente a la necesidad de solventar parte de los gastos del Comedor, “hubo una persona, un señor Araujo, que inició una campaña solidaria en favor del comedor”. “Con ese dinero que se recaudaba de socios adherentes, gente que quería donar una cuota todos los meses, nosotros podíamos terminar de construir el comedor este año”, siguió relatando.
No obstante, aclaró que gran parte de lo donado se convertía en cuestionable ganancia para terceros: “Las cuotas eran de 100 o 200 pesos. Una parte del dinero recaudado era para ellos, otra para los chicos que hacían la recaudación y una tercera parte para nosotros “, admitió.
La situación se habría tornado sospechosa a partir de la no aclarada desaparición de una parte de los cartones que certificaban las donaciones: “Me dolió que este señor dijo que algunos de los cartones de socios adherentes, se le habían perdido o se los habían robado”, deploró María González.
Tras lo sucedido, se decidió suspender la campaña, pero alguien, probablemente utilizándolos cartones supuestamente robados, estaría recaudando para su propio beneficio: “Hay una mujer que anda cobrando”, se alarmó María, quien agregó que tiene testimonios de personas que han sido visitadas por una mujer reclamándoles la cuota, aun después de que les había comunicado la suspensión de la campaña.
Con los servicios de un prestigioso estudio jurídico local, María González está buscando que se aclare la situación y se aprehenda a quienes serían los estafadores. “El abogado tiene el número de patente del vehículo”, en que se moviliza la mujer, por lo cual esperan identificar a la estafadora en breve.
“Tenemos también el número de teléfono –agregó María- pero no atiende nadie, un señor al que fueron a cobrarle nos contó que se negó a darles dinero porque ya estaba advertido”.
Mientras tanto, el Comedor de María solicita que no se hagan donaciones a terceros hasta tanto se aclare la situación y se comience una nueva campaña, “con otra metodología más segura”.
“Me duele porque era para el comedor, no para mí, queríamos terminar el espacio”, lamentó María.
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