El periódico The New York Post afirmó en su edición online que la camarera del hotel Sofitel de Manhattan que acusó de violación a Dominique Strauss-Kahn, el ex número uno del Fondo Monetario Internacional (FMI), «es una prostituta».
Según el diario neoyorquino, «las indicaciones en base a las cuales la mujer trabajaba como prostituta del hotel podrían explicar porqué Strauss Kahn insiste en afirmar que el encuentro estaba acordado».
El diario aseveró que la camarera «estaba haciendo un doble trabajo como prostituta, recabando dinero de huéspedes hombres».
Citó a quien dice es una fuente anónima cercana a la investigación de la defensa, que afirma: «hay información de ella obteniendo propinas extraordinarias, si usted entiende a lo que me refiero. Y no era por llevar unas malditas toallas extras».