La satisfacción de los investigadores que viajaron desde Tierra del Fuego a Buenos Aires estaba más que justificada. El operativo en tierras ajenas a su jurisdicción resultó rotundamente exitoso y permitió reunir todas las pruebas necesarias contra la banda de estafadores detenidos en Ushuaia
La información a la que tuvo acceso radiofueguina.com detalla que la comitiva de uniformados fueguinos encabezada por el secretario de Seguridad Javier Eposto pudo dar en el barrio porteño de Palermo con el lujoso departamento donde vivían al menos cuatro de los delincuentes y donde además tenían instalado el laboratorio para clonar tarjetas de débito y de crédito.
Verdaderos profesionales
Siguiendo instrucciones de la Jueza de Instrucción María Cristina Barrionuevo, efectivos de Delitos Complejos de la Policía de Tierra del Fuego, con apoyo de la Oficina de Ciberdelitos contra el sistema Financiero de la Policía de la Ciudad, allanaron el inmueble donde incautaron más de un centenar de plásticos clonados, tarjetas en blanco y moldes para confeccionarlos.
En lo que resultó ser un verdadero laboratorio de falsificación de documentación se hallaron además formularios para la confección de DNI, una impresora apta para la falsificación y “boquillas” aptas para ser introducidas ocultas en los cajeros electrónicos donde realizaban las maniobras de captación de datos de las tarjetas que se iban a clonar.
Fuentes de la investigación confirmaron que en el departamento allanado moraban los cuatro ciudadanos brasileños que fueron detenidos en Ushuaia, pero no se descarta que haya más sujetos asociados a la banda desbaratada.
Los cuatro serán indagados en los próximos días por la jueza Barrionuevo, para lo cual uno de ellos –que fue recapturado en Buenos Aires después de haber fugado de Ushuaia- retornará a la provincia junto con la comisión policial que fue destacada para el operativo que culminó con total éxito.
Operaban «en células»
La banda de estafadores estaba compuesta por cuatro personas. Uno que se dedicaba a clonar, con conocimiento de sistemas. Los otros tres se dedicaban a buscar información de las víctimas en distintas entidades bancarias por medio de conectores de acceso (que se colocan en el lugar de ingreso de las tarjetas) y boquillas (aparatos que se colocan en las puertas de los bancos).
Mientras continúa la investigación, la jueza Dra. Barrionuevo requirió a la Cancillería que averigüe ante el Poder Judicial de Brasil la titularidad de las huellas dactilares de los detenidos. Esto se debe a que se tienen todavía dudas sobre la identidad real de estas personas.
Comentarios