(Río Grande, 22 de mayo de 2011) – Un matrimonio de tucumanos y una pareja que baila en la plaza de San Telmo se consagraron anoche como campeones de tango en el Noveno Campeonato de Baile de la Ciudad, en el que además un porteño y su novia fueguina ganaron en milonga y vals.
Los campeones 2011 de tango, categoría senior, fueron Aldo Romero, taquígrafo del Senado, y Ana Lía Carrizo, docente de tango, ambos tucumanos radicados hace 20 años en Buenos Aires, que tienen un hijo de 22 y otro de 14, y que ya estuvieron en dos finales de mundiales de baile de tango.
Bailan la música ciudadana desde hace más de diez años y van al menos una vez por semana a milongas como Sunderlan, Sin Rumbo, Salón Canning y La Ideal.
«Cuando ganamos no lo podíamos creer. Sentí mucho orgullo, por mi familia, por mis maestros, y hasta me dieron ganas de llorar, pero no lloré», dijo, feliz, Romero, tras la premiación.
Su esposa comentó que al competir sintieron que habían bailado bien, pero «nadie sabe cuál será el resultado, porque los que llegaron hasta la final son los mejores, y cualquiera podía ganar».
En la categoría adulto (sub-40), los triunfadores fueron el porteño Pedro Ochoa y la santacruceña Natalia Almada, que no son pareja en la vida sino únicamente cuando ofrecen su arte en la plaza Dorrego, de San Telmo, y que bailan juntos hace apenas un año.
Ochoa revela que compitió en torneos anteriores pero nunca llegó tan alto, «evidentemente es por la compañera que tengo», a la que conoció hace poco más de un años cuando su anterior pareja para el show decidió cambiar de trabajo y tuvo que convocar a una reemplazante.
Con Natalia, nativa de Río Gallegos que vive en Buenos Aires desde 2002, practica diariamente por su trabajo juntos, y ambos sienten que este logro «más allá del resultado, los afirma como pareja artística». «Esto recién empieza», dice Natalia.
Ambas parejas recibieron un premio de 18.000 pesos y quedaron automáticamente clasificadas para la final del próximo Mundial de Tango, a disputarse en agosto en esta ciudad.
El doblete en milonga y vals fue del porteño Mario De Camillis, de 30 años, nacido en el barrio de Versalles, y la fueguina Bárbara Wainnright, de 24, quienes ganaron 9.000 pesos por cada uno de sus trofeos, y salieron segundos en tango adulto.
Cargados de copas y de flores, recordaron que él estudiaba filosofía y no se podía estar quieto en las clases, hasta que «un día, en 2001, en medio de una clase de medieval, me fui y desde entonces me dediqué al tango».
Ella, en su Río Grande natal, bailó desde los dos años toda clase de danzas y se interesó por el tango cuando vino a vivir a Buenos Aires en 2005.
La pareja se formó por la presentación de un amigo, Eduardo Aria, en Milonga 10, en Villa Crespo, y desde entonces han transitado muchos kilómetros de pistas juntos, e incluso dan clases en El Metejón, en Almagro.
«Llegamos a esta final muy nerviosos y con muchas ganas de competir», dijeron a Télam, después de haber sido los que más festejaron el resultado.
La final del Noveno Campeonato de Baile de la Ciudad se disputó en el barroco teatro del Colegio San José, de esta ciudad, organizado por el ministerio porteño de Cultura.
En el certamen participaron 380 parejas que disputaron desde principios de mes las rondas clasificatorias en 16 milongas porteñas. Así surgieron 92 binomios que compitieron en las semifinales en la semana que pasó, donde quedaron en carrera las 25 que llegaron a la final. (Télam)