Funcionarios de la gobernadora Rosana Bertone aseguran que se estudia caso por caso la situación de los talleristas, cuyo despido en masa fue denunciado esta semana, buscando detectar irregularidades cometidas por la gestión de Fabiana Ríos en la asignación de horas cátedras.
Responden así al reclamo de ex talleristas del área de Cultura que fueron despedidos a partir del 1 de enero. Afirman en el gobierno que el relevamiento incluye la documentación, horarios y tarea que realizaba cada tallerista.
El Secretario de Cultura Hugo Santos admitió que la baja de las horas cátedra está estrechamente vinculada a “las distintas denuncias por la irregular distribución de las mismas”. “Es un hecho incómodo, pero el Gobierno está dispuesto a asumir algunos costos para que las cosas entren en un orden razonable y lógico”, sostuvo Santos.
Los talleres eran financiados con horas cátedra cedidas por el Ministerio de Educación, metodología que fue denunciada por el SUTEF y por una legisladora; dando como resultado una investigación de parte del Tribunal de Cuentas de la Provincia que sugirió una serie de cambios en la forma en que se adjudicaban.
“Estamos haciendo el análisis tallerista por tallerista, de cuáles son sus horarios, si tenían la documentación, si presentaban declaración jurada. Hemos encontrado casos donde la declaración jurada más nueva es del 2009. Hay que poner todo en regla y ordenar, y a partir de allí realizar una evaluación de qué talleres pueden continuar y cuáles no”, afirmó el funcionario.
Santos desmintió también que sean 250 talleristas los afectados por la medida, asegurando que son 179 los verificados desde el Gobierno, donde entre el 70 y el 80% poseen otros ingresos.
“Al margen que no es bueno que haya gente que quede sin trabajo, la situación es más dramática para quienes sólo tienen eso ingreso. Por eso se trata de hacer todo lo más rápido posible, atendiendo a la situación de esa gente”, señaló el Secretario de Cultura.