La incertidumbre y el juego de intereses planteados alrededor de la fecha de los partidos entre Boca y River, por los octavos de final de la Copa Libertadores, tienen un desenlace e incluso fueron admitidos por los dirigentes xeneizes. Hoy saldrá la confirmación de la Conmebol: jugarán el 7 y el 14 de mayo.
El presidente de Boca, Daniel Angelici, admitió que en «un 99,9% los superclásicos por Copa Libertadores se jugarán el 7 y el 14 de mayo. Hay una prioridad para que los equipos brasileños jueguen los miércoles. Mañana [por hoy] se va a definir, pero es muy probable que pase lo que les estoy diciendo».
En la intimidad del cuerpo técnico de Boca nunca cayó bien el supuesto cambio de fecha, pues según tenían entendido que el partido se debía disputar el 6 y el 13 de mayo. A tal punto llegó el enojo que el domingo pasado, luego de la victoria sobre Lanús, el entrenador Rodolfo Arruabarrena se expresó con declaraciones fuertes y hasta expuso una cierta «ineptitud de Boca» en el caso. «Se ve que ese día tuvo un día malo, una mala información. Dijo una frase que a nosotros no nos gustó. Un momento de calentura lo puede tener cualquiera», señaló sobre el técnico, a quien considera «una excelente persona», según manifestó Angelici en una entrevista con Radio América.
Angelici también dijo que el debate sobre las fechas no debería haber existido, porque si bien todos los partidos de octavos de final figuraban con fechas del 6 y 13, se sabía que se iban a esperar los cruces definitivos para diagramar el calendario. «Todos los partidos estaban cargados el 6 y el 13, y todos sabemos que no se juegan todos los partidos el mismo día. Es un tema terminado», sentenció Angelici, que con su intervención salió al cruce de las diferencias internas que existen en el mundo Boca, nada menos que en un año electoral. Lo concreto es que el presidente se separó del discurso de sospecha que existe puertas adentro, especialmente en el cuerpo técnico, que están convencidos de que los últimos arbitrajes favorecieron a River.
Herrera o Loustau, el referí en el torneo
La AFA comunicó que el Superclásico del 3 de mayo, por el torneo local, será dirigido por Darío Herrera o Patricio Loustau, que irán a sorteo; el que no sea elegido para Boca-River arbitrará Rosario Central vs. Huracán. En 2011, Loustau condujo, también en la Bombonera y con gran polémica, un Boca 2 vs. River 0.
(Cancha Llena)
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