El objetivo del hacker, quien fue identificado sólo como Patrick, fue enfrentar a los ciber-donjuanes a sus propios artilugios a la hora de intentar conquistar a las mujeres con frases desubicadas, subidas de tono o directamente soeces, informó el sitio The Verge.
Patrick conoció a su actual novia a través de Tinder, pero el hacker de California se cansó de escuchar a sus amigas quejarse por los comentarios poco galantes de los usuarios que las contactaban a través de esa apliación de citas. Por eso, el hombre manipuló la aplicación para que cada vez que un usuario le pusiera «me gusta» a la foto de una determinada chica (que primero fue una famosa vlogger -con «v»- y después la de una amiga suya), cayera instantáneamente en las garras de otro usuario varón.
Existen aplicaciones de citas especiales para los muchachos que quieren conocer hombres, así que la sorpresa de los usuarios de Tinder embaucados por Patrick no fue menor. «Todas las fotos son mías. Soy de sexo masculino. Un hombre. Tengo pene, no vagina», fue el mensaje más civilizado que se registró en las 40 conversaciones monitoreadas por Patrick durante las primeras 12 horas de su «broma pesada». «Volvamos al tema del género. Seamos honestos antes de seguir charlando. ¿Qué tenés entre las piernas y qué buscás?», preguntó otro usuario, a lo que su interlocutor sólo pudo articular: «No sé si me estás jodiendo o no».
Pero por fin uno de los muchachos en una de las conversaciones se percató del enredo generado por Patrick: «Lol… flaco, los dos estamos mirando a la misma foto de perfil (de una chica)», anunció, y fue el fin de la charla. Fuente: Minutouno
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