Marcelo Moura, el músico integrante del histórico grupo del rock nacional Virus, publicó en su cuenta de Facebook una solicitud en la que reclamaba que «no pertenecía ni quería pertenecer» al listado de «Músicos con Cristina [Kirchner]», que agrupa a artistas que apoyan a la Presidente. «Jamás firmó ese largo y dudoso listado de pertenencia, ni lo haría», aclaró en la red social. Y pedía a los «responsables de semejante falacia, por favor retiren su nombre y apellido».
Tras hacer ese descargo, el cantante y compositor contó que recibió una amenaza: «Dejaron en mi casa una nota diciendo ‘lo que hiciste en Fabebook te va a costar caro, cuidá a tus hijos porque van a tener un accidente’. Quiero aclararles que a mis hijos los cuido siempre y que no sé lo que es el miedo y no vine a esta vida para ser un sumiso ni hacer lo que me convenga. Deseo transitarla con decencia, con ética y aportando aunque sea un granito de arena, tratando cada día de superarme, de cambiar las cosas que hago mal y de aportar humildemente con mi música una esperanza en este mundo tan carente de ejemplos».
Luego, Moura se refirió al gran revuelo que se generó por este pedido, en una entrevista con Fernando Bravo en su programa de Radio Continental: «Yo un poco minimizo el tema de la amenaza porque parece más producto de algún fundamentalista (…). El tema se fue de las manos: me llaman para decirme que aparezco en un listado de músicos que apoyan a Cristina, a quienes conozco y quiero mucho, son colegas míos. Cuando me comentan que estoy en el listado simplemente por el mismo medio que fue por Facebook contesté eso, comenté que me saquen porque yo no firmé nada. De ‘Músicos por Cristina’ me llamaron inmediatamente y me pidieron mil disculpas y sacaron el listado de la página. Pero como eso se había replicado por muchísima gente, seguía estando en otras páginas. Muy azorado comencé a leer los comentarios que en su mayoría eran de apoyo hacia mí. Pero los que no, eran muy violentos y con insultos, pidiéndome que dijera de qué lado estaba, que no oculte mi postura política».
Más tarde, Marcelo habló sobre el clima tenso que se vive en nuestro país: «Estamos viviendo en un fundamentalismo casi talibán. Hago un comentario cuasi político donde digo que en la Argentina no somos 12 partidos políticos, somos 40 millones de hermanos que tenemos que tirar para el mismo lado. No pertenezco, ni pertenecí, ni pertenecerá a ninguna facción política porque no creo que la decencia ni la corrupción sean propiedad de ningún partido. Todos los partidos tienen gente corrupta y decente y yo siempre me enganché desde el lado solidario, nunca me enganché con un partido para sacar rédito».
Por otra parte, señaló que durante la última dictadura militar vivió el horror con su hermano: «Tengo un hermano asesinado. Vinieron a mi casa cien personas. Él no estaba, estuvieron ocho horas en mi casa. Yo tenía 16 años. Lo único que le pedí al jefe de tareas fue poder darle un beso porque sabía que no iba a verlo más. Cuando me acerqué mi hermano me miró, yo estaba apuntado con fusiles en la cabeza… Detrás había un hombre que con la culata de un fusil le abrió la cabeza y el jefe me dijo ‘ahí tenés el beso, mi amor’. Y se lo llevaron».
También manifestó que una sola vez participó en una campaña política: «Estoy defendiendo una postura, si revuelven los 35 años de historia de Virus no van a encontrar una mancha, solo cuando hicimos la campaña de Angeloz cuando estaba disputando con Menem la presidencia. Con el Flaco Spinetta tuvimos una charla, nos daba terror que Menem asumiera como presidente. Después el tiempo me dio la razón».
Por último destacó haber recibido cientos de propuestas por muchísimo dinero para tocar como parte de un partido político, pero aclaró que se negó sistemáticamente. Finalmente declaró que no hará ninguna denuncia por la amenaza que recibió: «Como hicimos cuando pasó lo de mi hermano, al odio se le contesta con amor».
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