En un mismo partido, Independiente pudo saldar dos cuentas pendientes. Con una buena actuación colectiva y destacadas individualidades, el Rojo aplastó 4-0 a Arsenal y, además de sumar la primera victoria de local, también pudo reencontrarse con su gente.
Federico Mancuello al minuto de juego, de Claudio Riaño adelantaron al equipo de Jorge Almirón en la primera parte, mientras que Lucas Albertengo y Víctor Cuesta, de cabeza, liquidaron el encuentro en la segunda mitad.
Con momentos de buen fútbol y extrema contundencia, el Rojo por fin se sacó la espina de vencer como local, ante un Arsenal que sólo tuvo un atisbo de reacción en la primera mitad, mas luego fue espectador de lujo de la función de Independiente.
Un arranque arrollador tuvo el elenco local, que salió con la determinación de conseguir la primera victoria en su estadio y que vio facilitada esa tarea apenas comenzado el encuentro por un error de la defensa visitante.
Al minuto de juego, el arquero de Arsenal Alejandro Limia jugó con los defensores ante la presión del equipo anfitrión, Matías Sarulyte la perdió frente a la marca de Matías Pisano y Jesús Méndez envió con celeridad el balón al área. Allí, Riaño la bajó de cabeza para Albertengo, quien abrió el balón hacia la izquierda para la llegada de Mancuello, quien colocó su disparo en el ángulo izquierdo.
En un comienzo de partido casi demoledor, Independiente contó con otras tres situaciones de gol y amplió la distancia a los 15, con un preciso centro desde la derecha de Méndez que Riaño conectó de cabeza, llamativamente en soledad entre los centrales del conjunto de Sarandí.
Parecía que Independiente iba a consumar una goleada y a los 25 hasta tuvo la chance del tercero con un cabezazo de Cuesta que exigió a Limia, pero terminó bajando las revoluciones más de la cuenta, se recostó en el 2-0 y Arsenal estuvo a punto de descontar.
Fue a los 36, cuando el arquero Diego Matías Rodríguez bloqueó un cabezazo del uruguayo Santiago Silva sobre el palo izquierdo y acto seguido descolgó a la altura del ángulo superior derecho un tiro desde la media distancia de Pablo Burzio.
En el segundo capítulo, Independiente intentó defenderse con la pelota, pero sin ejercer un juego demasiado ofensivo, priorizando la tenencia del balón, aunque cada vez que atacó hizo tambalear a la frágil resistencia del visitante.
A los 7, Mancuello sacudió el travesaño con un tiro libre y, a los 18, Méndez envió un preciso pase con la cara externa del botín derecho para que Albertengo definiera con corrección ante la salida de Limia.
Paciente, y beneficiado por la resignación de un Arsenal abatido, el local puso el 4-0 con un cabezazo de Cuesta tras un tiro libre de Mancuello que puso cifras definitivas al resultado.
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