Publicado en

Base Marambio: Fotovoltaica en frío extremo

El sistema tiene una potencia de 1,92 kWp y está compuesto por 8 módulos de silicio de 240 Wp cada uno, con un inversor de tensión para conexión a red de 1,5 kW.

marambio

En la base antártica argentina Marambio acaba de entrar en funcionamiento un sistema fotovoltaico, cuyos paneles se han instalado en los techos del edificio de terminal de pasajeros, desde donde inyecta energía eléctrica en la red de baja tensión. El sistema tiene una potencia de 1,92 kWp y está compuesto por 8 módulos de silicio de 240 Wp cada uno, con un inversor de tensión para conexión a red de 1,5 kW.

El proyecto ha sido liderado por un equipo de IRESUD (Interconexión a Red de Energía Solar Urbana Distribuida) -en la imagen-, un asociación público?privada que incluye a la Comisión Nacional de Energía Atómica (Departamento Energía Solar) y a la Universidad Nacional de San Martín (Escuela de Ciencia y Tecnología), por un lado, y a las empresas privadas Aldar, Edenor, Eurotec Nutrition Argentina, Qmax y Tyco Electronics Argentina.

Desde 1969 la base recibe en su pista aeroplanos que llegan a una zona en donde pueden soplar vientos de más de 200 km por hora a temperaturas de varias decenas de grado bajo cero. En invierno, Marambio tiene cerca de 75 habitantes, cifra que se duplica en la aún fría temporada estival.

La demanda eléctrica proviene tanto del centro meteorológico como del museo, además del hangar para las aeronaves, la antena satelital para televisión, conexión a internet y planta transmisora, gimnasio, talleres de herrería, carpintería y tornería, laboratorios y una planta de tratamiento de residuos cloacales.

Como complemento para la generación de energía, se espera en breve instalar un aerogenerador de capacidad de 5 kW de potencia, especialmente diseñado para resistir los embates de las fuertes y frías tempestades antárticas.

Según el director del Departamento de Energía Solar de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y director de IRESUD, Julio Durán, la instalación “pretende demostrar la factibilidad del uso de este tipo de tecnología en climas extremos como el de la Antártida”.

Comentarios