El seleccionado argentino de básquetbol se impuso esta noche a Uruguay por 97-60, y se adjudicó el torneo Súper 4 Copa Ciudad de Buenos Aires que se disputó en el estadio Luna Park. Así, se despidió de la Capital Federal, en lo que es la preparación para la defensa del oro en Beijing 2008.
Luis Scola fue el goleador del partido con 26 puntos, mientras que Paolo Quinteros lo escoltó con 21 unidades. Igualmente, la ovación de la noche se la llevó el Chapu Nocioni, por la garra que llevó al seleccionado a sacar una ventaja que casi llegó a los 40 puntos.
El arranque del partido fue el peor momento que vivió la Argentina en el transcurso del encuentro, especialmente por dos motivos: careció de puntería y porque tanto en defensa como en ataque no pudo neutralizar a los internos uruguayos, Estaban Batista y Gastón Páez.
A raíz de esto, Uruguay fue el dominador del trámite y del marcador, destacándose especialmente el trabajo de Batista, porque controló a Román González y en ese primer cuarto convirtió 12 puntos. Pero Argentina comenzó a meterse en el partido y termino igualando el encuentro con un doble de Pablo Priggioni sobre la chicharra.
El segundo cuarto fue otra historia, algo más acorde a lo que se esperaba en la previa. Como punto de partida del cambio en el elenco que dirige Sergio Hernández hay que mencionar el ingreso de Juan Gutiérrez, quien no sólo controló mejor a Batista, sino que también fue efectivo en ataque (en el segundo cuarto marcó 7 puntos).
A partir de la neutralización del pivote uruguayo el seleccionado argentino se sacó un problema de encima y comenzó a desplegar todo su poderío ofensivo. Desde la defensa y con un Scola que volvió a mostrar todo su repertorio el equipo comenzó a despegarse en el marcador y a 3 minutos del final del primer tiempo ya le había sacado 10 puntos de ventaja (41-31) a su rival.
Con el resultado a su favor el seleccionado argentino manejo el resto del partido con mucha tranquilidad y hasta se dio el gusto de jugar lujosamente en algunos pasajes. Nuevamente a la hora de hablar de lucimientos personales en este lapso sobresalió Scola, quien ante la ausencia de Emanuel Ginobili volvió a demostrar que es un jugador de otro nivel.
Un párrafo a parte se merece Nocioni, quien disputó cada pelota como si fuera la última y por eso recibió el reconocimiento del público. La Argentina fue mucho más que Uruguay, ganó, por momentos gustó y tras adjudicarse este Súper 4 sigue pensando en buscar la mejor forma para llegar a Beijing.
Fuente: Clarin