El artículo consiga que el contrato que el banco espeñol tiene con la escudería McLaren termina también a finales de 2009, por lo que entonces podría cambiar de coche libremente.< ?xml:namespace prefix = o ns = "urn:schemas-microsoft-com:office:office" />
Sin embargo, las mismas fuentes revelan que la entidad bancaria estaría intentando resolver su vinculación con McLaren a fines de este mismo año, con un costo de 20 millones de euros.
Este acelerón estaría provocado por la llegada a final de año del español a Ferrari.
Pero las cosas no son tan simples, ya que Ferrari tendría que despedir a uno de sus dos pilotos, Felipe Massa o Kimi Raikkonen.
En la escudería de Maranello, con alergia a los escándalos y la rumorología, aseguran que ellos «nunca rompen un contrato» y justifican rápidamente el único caso que sucedió en la historia reciente: Rubens Barrichello, el escudero de Michael Schumacher que se aburrió de su papel y a finales de 2005 pidió la baja.
La vía hacia los monoplazas rojos aparece más despejada para Alonso en 2010, cuando expira el acuerdo de Raikkonen.
El finlandés, según informa el artículo, piensa seriamente en la retirada entonces como una alternativa.
El Banco Santander se plantea su entrada en el histórico equipo, con Alonso si es posible, dentro de 18 meses.
La abrupta salida de McLaren de Alonso hizo cambiar al Banco Santander de estrategia, atrapado de repente en el bando enemigo.
Decidieron seguir adelante en la escudería de Woking, aunque midiendo con tacto la explotación del producto en España.
Fuente: Telam