El senador nacional Pablo Blanco (UCR) se mostró confiado en que la hipotética privatización de Aerolíneas Argentinas, impulsada por el gobierno nacional, no prosperará en el Congreso de la Nación. Blanco, por ((La 97)) Radio Fueguina, esgrimió que existen suficientes resistencias tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado para bloquear una medida que, de concretarse, afectaría gravemente a la provincia de Tierra del Fuego, y a otras regiones periféricas, en términos de conectividad y desarrollo.
El senador explicó que la iniciativa privatizadora está amparada en la Ley de Modernización del Estado, conocida como Ley Dromi, que establece un mecanismo por el cual el gobierno debe emitir un decreto señalando qué empresas estatales están sujetas a privatización. Dicho decreto debe ser tratado en el Congreso, iniciando su análisis en la Cámara de Diputados, que tendrá la tarea de decidir si aprueba o no la privatización, y bajo qué condiciones. “Quiero hacer una aclaración. El decreto que mandó el gobierno nacional a la Cámara de Diputados está en el marco de la Ley de Modernización del Estado de Dromi, no es producto de la Ley Bases como a algunos les gusta escribir en las redes”, afirmó Blanco, en referencia a interpretaciones incorrectas que circulan en distintos ámbitos.
Sin embargo, fue claro al señalar que, aunque es posible que la Cámara de Diputados apruebe la privatización de la aerolínea de bandera, él considera que la medida será bloqueada en el Senado. “Yo estoy seguro que no va a salir. Yo hice un recuento más o menos con el tema este y había entre 42 y 44 voluntades contrarias a la privatización de Aerolíneas”, sostuvo, mostrando su optimismo en que no se alcance la cantidad de votos necesarios para que la iniciativa avance en la Cámara Alta.
Pese a su rechazo frontal a la privatización, Blanco reconoció que Aerolíneas Argentinas necesita una profunda reestructuración y reorganización para mejorar su funcionamiento. “Esto no quita que hay que hacer una reestructuración y una reorganización de Aerolíneas Argentinas, porque tampoco puede funcionar como funciona”, admitió, haciendo eco de las críticas hacia la gestión de la empresa.
Blanco argumentó que la existencia de una aerolínea de bandera es fundamental para garantizar la conectividad de las provincias más alejadas, como Tierra del Fuego, particularmente para ciudades como Río Grande, que ya ha sufrido en el pasado el abandono de las aerolíneas comerciales. “Nosotros necesitamos una aerolínea estatal de bandera, porque si no, en el caso de Tierra de Fuego, Río Grande, vamos a ser parias, como ya sucedió en su momento cuando fue Aerolíneas Argentinas privatizada y eso que en esa época Ushuaia también era un centro turístico”, señaló.
En este sentido, fue crítico respecto a la posibilidad de que aerolíneas comerciales privadas o de bajo costo se interesen en mantener la conectividad en las ciudades más remotas del país. Hizo un recuento de localidades que, según su visión, serían ignoradas por las empresas privadas: “Río Grande estaba prácticamente abandonado porque las low cost no les interesa venir a Río Grande o Río Gallegos, sí Calafate. ¿Qué empresa va a ir a Trelew? van a ir a Madryn, pero no a Trelew, a lo mejor Comodoro Rivadavia por la actividad del petróleo. ¿Quién va a ir a Viedma, quién va a ir a Santa Rosa?”.
Según su visión, el Estado tiene la responsabilidad de asegurar la conectividad de todas las regiones del país, especialmente aquellas que, por su ubicación geográfica y características demográficas, no resultan atractivas para las aerolíneas privadas. Esta obligación cobra una relevancia aún mayor en el caso de Tierra del Fuego. “El Gobierno tiene la obligación de garantizar la conectividad de sus habitantes. Con más razón nosotros que vivimos además a 3000 km que para ir por tierra, como ellos dicen ‘tomate un colectivo’. Para ir por tierra yo tengo que pasar por Chile, cruzar el estrecho de Magallanes y tardo tres días y medio”, expresó.
En contraposición, criticó la visión centralista que, a su entender, caracteriza a las autoridades nacionales y a quienes apoyan la privatización de Aerolíneas Argentinas. Según el senador, muchos de los impulsores de esta medida no contemplan las necesidades de las regiones más alejadas del centro del país. “En el centro del país en 10 horas, 12 horas, lo más lo más lejano, Salta, estás. Pero ellos no la ven, como dice Milei. Ellos ven el Obelisco y alrededor, nada más”, concluyó Pablo Blanco, subrayando la desconexión entre las realidades que enfrentan las provincias periféricas y las decisiones que se toman en Buenos Aires.
Comentarios