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Río Grande

Siguen los problemas edilicios en escuelas de la provincia 

Las clases dieron inicio luego del receso invernal en la provincia, incluyendo la Escuela Número 2 para Adolescentes y Adultos “Wikam”. En una entrevista exclusiva para “Radio Noticias” de ((La 97)), su vicedirectora, Elisa Lucero, explicó que las autoridades informaron al establecimiento la falta de fondos para solucionar algunas cuestiones edilicias como falta de picaportes y problemas de iluminación.

Con el regreso a las aulas tras el receso invernal, la provincia de Tierra del Fuego se enfrenta a una realidad compleja en algunos de sus establecimientos educativos. A pesar de los problemas edilicios que persisten en varias escuelas, se dio inicio a las clases.

Elisa Lucero, Vice directora de la Escuela Provincial Número 2 para Adolescentes y Adultos “Wikam”. En exclusiva para el programa “Radio Noticias” de ((La 97)), Radio Fueguina, Lucero explicó que la escuela ha estado lidiando con problemas persistentes relacionados con puertas y sistemas de iluminación desde hace tiempo. 

«Cuando se inició el receso invernal, se planteó el cambio de algunas puertas y picaportes, cuestiones que parecen menores, pero que no han sido resueltas oportunamente», señaló.

A pesar de estas complicaciones, la decisión de retomar las clases se basó principalmente en la necesidad de asegurar que los estudiantes continúen con su formación tras el mes de receso. «Es vital para nosotros que aquellos que asisten a este lugar tengan la continuidad de su educación», comentó Lucero.

Lucero mencionó que el problema más crítico involucra la puerta de ingreso, que carece de picaporte. «La puerta no se puede abrir ni cerrar adecuadamente, además, esto representa un riesgo en caso de una emergencia, especialmente porque aquí asisten muchos chicos en proceso de inclusión», advirtió.

Sobre el estado de la calefacción, la vice directora relató que, si bien en general el sistema de calefacción puede resolverse rápidamente, en esta ocasión se experimentó una demora inusual. «La caldera se apaga a veces debido a los vientos o porque alguien la toca, pero generalmente se soluciona en el mismo día. Sin embargo, esta vez tuvimos que esperar más de 48 horas para un repuesto», explicó.

A pesar de los reclamos constantes y la documentación presentada a las autoridades sobre la situación edilicia, Lucero expresó su descontento con la respuesta que han recibido respecto a las reparaciones: «Desde la infraestructura nos dicen que no hay fondos disponibles para cubrir los insumos necesarios».

Sin embargo, la Escuela “Wikam” no ha suspendido clases en lo que va del año, manteniendo el funcionamiento normal del ciclo lectivo. “La puerta abre y cierra, aunque la dificultad persiste. Lo que queremos es garantizar un ambiente seguro y adecuado para todos nuestros estudiantes”, mencionó Lucero, teniendo en cuenta que el problema de iluminación tampoco está resuelto.

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