A raíz de las bajas temperaturas, muchas familias de la ciudad tienen a utilizar distintos artefactos con el fin de poder calefaccionarse dentro de sus domicilios. Lamentablemente, mucho de estos casos terminaron con intoxicación de monóxido de carbono, siendo estos casos uno de los llamados recurrentes a los servicios de emergencia de Río Grande.
En este sentido, «el vecino siempre llama al 103 cuando tiene dudas o sospechas de lo que ocurre en su hogar o en el lugar de trabajo», afirmó el Director de Defensa Civil Municipal, Sebastián Águila, en diálogo con ((La 97)) Radio Fueguina. El funcionario indicó que en estos casos suelen realizarles preguntas a quienes acuden al 103, con el fin de ahondar más en la situación «y en caso de intervenir, activamos todos los servicios de emergencia».
Asimismo, comentó que «hay otras llamadas que no entran directamente a Defensa Civil, sino que nos contactan desde el hospital o la policía, porque hay familias que en caso de sentirse mal acuden al hospital». En estos casos, los peritos corroboran si el paciente que arribó al nosocomio presenta intoxicación por monóxido de carbono, y en caso de dar positivo, automáticamente llaman al 103. «Lo importante es que (los vecinos) se comunican con el servicio de emergencia y son atendidos», sostuvo el Director de Defensa Civil Municipal.
En el programa radial «Un Gran Día«, se le consultó al titular del área cuántas consultas recibieron desde que comenzó la ola de frío, y éste indicó que fueron cerca de 6 llamadas. «Entre ellas tuvimos una activación de 3 situaciones de emergencia, donde acudimos con los demás servicios por una intoxicación o supuesta», demostrando así, la calidad de trabajo ante estas situaciones que ponen en riesgo la vida de las personas.
«Nosotros trabajamos de forma articulada -comentó-. Recibimos la emergencia y vamos con el personal operativo. Trabajamos en conjunto porque entendemos que hay que entrar a la casa y colaboramos con la policía y Bomberos de esta área», explicó Águila. Asimismo, resaltó que todos los servicios que acuden al domicilio donde hay un posible caso de monóxido de carbono, cuentan con un detector, con el fin de apoyarse para hacer mediciones, lo que les permite tener parámetros más certeros.
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