«Resta todavía una semana». Con esa frase, el interventor del PRO en la provincia de Tierra del Fuego buscó calmar los apuros que existen entre los principales dirigentes de Juntos por el Cambio para que ese suscriba el acta de conformación del frente.
Se trata de Mariano Gallego, un personaje enviado desde Buenos Aires con chapa de interventor para decidir la suerte de los fueguinos. Se encuentra actualmente en Ushuaia, ciudad que desde el fin de semana se transformó en epicentro de las febriles negociaciones que tienen como interlocutores a autoridades de la Unión Cívica Radical (UCR), del Movimiento Integración y Desarrollo (MID) y de la Coalición Cívica y el citado Gallego como mandamás.
«Estamos conversando con todos. Nadie juega a las escondidas. Es un frente electoral y nos estamos poniendo de acuerdo en las condiciones. Tenemos divergencias pero no nos corre nadie”, señaló el dirigente hoy en diálogo con los medios de comunicación.
Pero esta falta de apuro no la comparten el resto de los actores que, desde hace días, tratan por todos los medios posibles de evitar un debilitamiento de Juntos por el Cambio que pueda llevar incluso a la ruptura del frente electoral, tal y como ocurrió en otros distritos.
“No entiendo la renuencia a firmar (la constitución de la alianza). Están demorando la firma del acuerdo para hacer imposible una interna. Nos están llevando a un terreno que nadie quiere”, señaló hoy el senador radical Pablo Blanco, quien además analizó el futuro de la alianza: “Si no nos podemos poner de acuerdo en conformar un frente político, mucho menos será con las candidaturas”.
Para Blanco, la dilatación por parte de Gallego no sería un hecho aislado, sino todo lo contrario, incluso premeditado: “No es el primer distrito que pasa esto. Sucedió en Río Negro, en Mendoza y en Tucumán. La estrategia del PRO es dificultar la conformación del frente”.
La convicción de todos es que Gallego -siguiendo el lineamiento trazado en Buenos Aires- quiere eludir la interna, una saludable costumbre a la que los radicales se oponen a renunciar. Para que esa incierta primaria encuentre lugar en el apretado calendario electoral, el Frente debe ser presentado ante la Justicia a más tardar este jueves.
Con este escenario, se complica la posibilidad de concretar lo que confirmaba la presidenta de la UCR fueguina, Liliana Martínez Allende, en febrero pasado: que el 26 de marzo Juntos por el Cambio dirima mediante internas quiénes son sus mejores hombres y sus mejores mujeres para el 14 de mayo.
En medio de la incertidumbre la hipótesis más probable, por estas horas, es que el Pro dejaría el frente Juntos por el Cambio (que quedaría constituido por los otros tres partidos) y se presentaría a elecciones con otra coalición, objetivo para el cual hay varios operadores trabajando en las sombras. Uno de ellos, el exdiputado de penosa gestión, Gastón Roma.
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