En declaraciones a ((La 97)) Radio Fueguina, Becerra señaló que “estamos sumamente agradecidas con la fábrica BGH, que este sábado estuvieron acompañando a las mujeres voluntarias y a los papás de Matías Miravete donde está el corazón que se hizo en honor a él, ese corazón que se llena diario de tapitas y son transportadas después, junto con todo el material que juntamos de los distintos puntos de la ciudad, tanto de tapitas como de latitas de aluminio, a la Fundación Garrahan”.
“Este sábado se hizo un trabajo muy importante en la plaza que lleva el nombre de Matías Maximiliano Miravete. Necesitaba una renovación y la fábrica BGH se puso al tanto de todo esto cuando pusimos a el corazón por primera vez, cuando se inauguró en Chacra IV, en la calle Garibaldi y Eladio Ibarra”, expusó la dirigente, y agregó que “fue un trabajo en comunicación con la gente de la Municipalidad, con todos los vecinos que colaboraron, con la gente que no es vecina de ahí pero se acercó a ayudar, y las pocas mujeres voluntarias que estamos en Río Grande”.
“El trabajo consistió en la renovación de la plaza, como ya lo había hecho en el traslado del corazón y se hizo una platea para que esté mejor empotrado, se hace el mantenimiento de los corazones, se habilitaron los juegos que se pintaron, y seguramente que se van a poder poner otros juegos más acorde a nuestros niños”, comento Becerra en una entrevista durante el programa radial “Un Gran Dïa”.
“La fábrica BGH realizó un refrigerio, después hicieron choripán, que compartieron con toda la comunidad que se acercó por ahí de ese barrio y de otros lugares, y la verdad es que no tengo palabras de agradecimiento, ya no sé cómo agradecerle a BGH todo lo que viene haciendo para la Fundación Garrahan, todo lo que viene haciendo dentro del proyecto de los corazones y los contenedores gigantes -remarcó Becerra-. Tenemos el 100% de acompañamiento y aparte para destacar a los empleados, que ellos se pusieron la camiseta de la Fundación Garrahan, porque este sábado había empleados de BGH de las distintas líneas, la gente de mantenimiento, los que diseñaron el corazón, los que diseñaron los contenedores de latas y que nos están diseñando otros corazones; así que mi eterno agradecimiento a la fábrica, a los directivos, a los empleados y a todos”.
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