“Sufrimos daños en nuestra sede en el lugar donde llevamos adelante las actividades que hacemos con niños niñas y jóvenes participantes del movimiento Scout”, dijo la dirigente Scout, y agregó que fue “a partir de la tormenta que se dio especialmente el día domingo, con vientos de alrededor de 220 km/h en las ráfaga que se registraron en las zonas aledañas y un poquito menos en la ciudad, pero que así todo fueron muy intensas”.
“Literalmente se nos voló un depósito que teníamos en un sector un poco más alto y también se rompió parte del techo de un sector en una parte del cerco perimetral y algunos cables tensores y algunos materiales que teníamos puestos como seguridad y materiales que teníamos para la construcción de la obra”, remarcó Segura.
“Hoy tenemos una construcción de un tanto precaria, con todas las medidas seguridad posibles, teniendo en cuenta que trabajamos con niños y somos personas quiénes estamos ahí en ese lugar -expuso la referente-, tomamos siempre todas las medidas de seguridad que se pueden pero es una construcción realizada por nosotros, en forma muy básica, pensando en la sede que estamos tratando de construir, más segura, más acorde, más cómoda para todos los chicos”.
En ese sentido, Rocío Segura amplió que “algunos materiales también que estamos juntando para esa construcción se volaron y gracias a la ayuda de educadores, de padres, de las familias que participan en el grupo y algunos vecinos que se acercaron a colaborar, pudimos juntar esos materiales que, si bien están arruinados el hecho es que no sigan volando y que pudieran causar más daños a los vecinos y más daños”.
“Fueron cosas materiales, gracias a Dios no hubo personas afectadas, nadie lastimado, ni herido ni nada, pero todo lo material, como a todos, nos cuesta muchísimo, todo se logra con muchísimo esfuerzo a partir del trabajo de las familia que participamos”, precisó la dirigente Scout.
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