La incertidumbre que existió hasta la misma tarde de ayer por conocer si finalmente llegaba o no el primer vuelo en 228 días a Río Grande, para algunos fue seguida de alivio. Pero para otros de bronca.
Es que la nave de Aerolíneas Argentinas que arribó en la tarde de ayer y despegó con destino a Ezeiza cerca de las 22 horas regresó a Buenos Aires repleto, con su capacidad máxima de pasajeros.
Pero varios que habían accedido a boletos aéreos quedaron en la ciudad, ya que Aerolíneas Argentinas había sobrevendido las plazas de la nave.
Así lo confirmaron a ((La 97)) Radio Fueguina fuentes de Aeropuertos Argentina 2000, que no pudieron precisar el número total de riograndenses que no pudieron viajar, aunque calcularon que esta práctica inescrupulosa (aunque legal) afectó a varias decenas de pasajeros.
Al haber sido un problema de Aerolíneas Argentinas, es esta propia empresa la que tendrá que rendir cuentas a los usuarios por haberlos dejado varados en Río Grande.
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