Las familias afectadas por el pavoroso incendio del miércoles pasado, que devoró 8 casas, han encontrado apoyo en toda la comunidad de Río Grande, además de las administraciones de gobierno.
Numerosos vecinos se acercaron hasta la zona de Colón y pasaje Namuncurá para dar una mano y entre ellos se encuentran un grupo de trabajadores del rubro de la construcción.
Es que uno de los afectados es afiliado al sindicato que los agrupa y por esto el sentimiento de solidaridad se convirtió en acción prontamente.
“Estamos colaborando con todas las familias afectadas, somos solidarios con esas familias, colaborando con alimentos, aportando elementos de construcción y ayudando en los trabajos”, explicó uno de los integrantes del grupo.
La ardua tarea de remoción de los escombros está finalizando y comienza la etapa de reconstrucción de lo que fueron las 8 casillas que el fuego se llevó.
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