Diferencias internas entre referentes de la Comunidad Selk’nam derivaron anoche en la ocupación pacífica de la Delegación de Gobierno de la Provincia en Río Grande y en la intervención de funcionarios judiciales para poner fin a su actitud.
La puja, que viene de larga data, alcanza incluso a la propia representatividad de la comunidad, ya que hay un sector que pretende forzar el desplazamiento de quienes ocupan el liderazgo.
Son precisamente éstos quienes reclaman ser atendidos por el gobernador de la Provincia para plantearle sus problemas. En razón de no haber recibido respuesta hasta el momento, ayer decidieron avanzar en su insólita actitud de ocupar las oficinas gubernamentales hasta tener una respuesta satisfactoria.
La toma pacífica fue declinada en pocas horas y luego de la intervención del Juez de Instrucción Daniel Cesari, quien los persuadió de la inconveniencia de persistir en la acción que podría llevarlos a ser acusados de delito.
Aproximadamente a las 22,00 del viernes los manifestantes dejaron la dependencia, tras lo cual emitieron un comunicado explicando su versión del conflicto. Según trascendió, habrían recibido la promesa de ser atendidos el próximo lunes por funcionarios del gobierno provincial.
Texto del comunicado:
La Comunidad Selk´nam Rafaela Ishton, repudia el accionar de un grupo de personas que invocando a nuestro pueblo, pidió la renuncia de la Secretaria de Pueblos Originarios Vanina Ojeda, hermana de nuestra comunidad, a quien se le reprocha iniciar las gestiones para que proveer de energía eléctrica a nuestro territorio comunitario, un reclamo iniciado por el Consejo de Ancianos en 2008 y que ningún otro gobierno había intentado resolver jamás.
Mientras hermanos de otros pueblos indígenas del país son golpeados, perseguidos y encarcelados por la policía por reclamar la instalación de los servicios básicos en sus tierras, como la energía eléctrica, el agua y el mejoramiento de los caminos, resulta contradictorio que un grupo de personas que se dicen selk´nam, en pleno invierno fueguino, se manifieste en contra de una obra que mejorará la vida de su propio pueblo.
Este accionar, tiene como líderes a personas que en enero de este año fueron expulsadas de la comunidad, y que no representan a nadie salvo a ellas mismas, porque han utilizado nuestro nombre para hacer negocios personales.
Esta semana, nuestros ancianos denunciaron la existencia de un sello ganado a nombre de la Comunidad Rafaela Ishton en el Ministerio de Producción y Ambiente que fue gestionado por dos de las personas que hoy se manifestaron en la Delegación de Gobierno de Río Grande. Ese sello, no tiene razón de existir, porque no hay personas en nuestra comunidad que posean ganado, por lo cual esta estafa a nuestra comunidad, revela también que se estarían cometiendo actos ilícitos, probablemente con ganado robado, ante lo cual hemos requerido la inmediata investigación de las autoridades provinciales.
Está muy claro que, al igual que en la cuestión del manejo del bosque, hay intereses económicos en juego que son externos a nuestro pueblo, y que requieren una “comunidad acéfala”, razón por la cual, personas inescrupulosas ávidas de poder y dinero, intentan como en este caso, usar a nuestro pueblo para intentar dividirnos mientras ellos hacen sus negocios.
Por ello, volvemos a aclarar que la única autoridad reconocida por esta comunidad es el Consejo de Ancianos y que nuestra forma de peticionar es la del respeto, el diálogo y el apego a las leyes.
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