AUDIVIC, una de las tradicionales fábricas de la ciudad de Río Grande, con más de 30 años de asiento en Tierra del Fuego, cerró definitivamente a mediados del año 2018, luego de un cobarde intento de vaciamiento.
Hasta ese momento, la firma había sobrevivido a varias crisis e incluso superado dos convocatorias de acreedores, pero el macrismo logró lo que incontables crisis no: que la empresa finalmente cerrara.
Con ese cierre, quedaron sin trabajo decenas de trabajadores que iniciaron un loable plan de lucha con ánimo de cobrar lo que les correspondía en concepto de indemnización o bien hacerse cargo ellos mismos de la producción.
Así, a fines de 2018, nació la Cooperativa de Trabajo Tierra del Fuego AUDIVIC Río Grande Ltda, que pretende iniciar en el futuro inmediato a producir y transformarse así en una fábrica recuperada por sus trabajadores, tal y como ocurre en Ushuaia con la Cooperativa Renacer.
Sin embargo, antes deben aguardar la autorización del juez Civil y Comercial Horacio Boccardo, que a la vez debe resolver el pedido de quiebra manifestado en su momento por AUDIVIC.
AUDIVIC, crónica de un vaciamiento (año 2018)
16 de febrero: Comienzan los retrasos. Es mitad de mes y Audivic aún no terminó de liquidar los salarios de los trabajadores. Hay manifestaciones por parte de la UOM y promesas de parte de la firma.
23 de febrero: Se confirma que más de 100 trabajadores (entre contratados y efectivos) quedarán en la calle al finalizar el mes. El argumento: la caída en la producción y las ventas.
23 de marzo: A un mes de licenciar a su personal, Audivic acumula deudas con los trabajadores, que denuncian escaso apoyo por parte de la Unión Obrera Metalúrgica.
26 de marzo: Gobierno mira con atención a Audivic. El Ministerio de Industria presta especial atención a lo que ocurre en la firma y manifiesta temor ante la posibilidad de que esta situación se traslade a otras empresas electrónicas.
13 de abril: Audivic no quiere negociar y declina esta vía en el Ministerio de Trabajo. Los operarios solo pueden accionar a través de la Justicia. Una situación que se repetirá a futuro.
17 de abril: El despido de un trabajador efectivo agrava la crisis en la empresa. Llega la UOM y comienzan las manifestaciones periódicas fuera de la empresa.
19 de junio: Pasan meses sin novedades y el gremio confirma que a pesar del pararte de la fábrica aún hay materiales para continuar con la producción de al menos 200 equipos más.
14 de julio: El vaciamiento. Los propios operarios descubren que la planta estaba siendo saqueada por los responsables cuando se descubrió la maniobra. El personal decide mantener la planta ocupada para frenar el vaciamiento.
15 de julio: El ministro Ramiro Caballero informa no se autorizará la salida de productos de la empresa en conflicto si no beneficia a los trabajadores.
16 de julio: Una manifestación tiene lugar en el patio de la firma y la UOM anuncia que está dispuesta a «ocupar fábricas» si es necesario.
17 de julio: Metalúrgicos piden asistencia al Gobierno de la provincia: solicitan que el Ejecutivo pague los sueldos atrasados y que luego Audivic devuelva el dinero. La propuesta cae en saco roto.
23 de julio: Fracasa una nueva audiencia en el Ministerio de Trabajo y los operarios piden reunirse con la gobernadora Rosana Bertone. El encuentro nunca se concreta.
30 de julio: Audivic declina la vía judicial e invita a los trabajadores a recurrir a la Justicia para intentar cobrar los salarios atrasados.
Con información de Desde las Bases
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