Bajo la premisa de allanar el camino para aprobar el presupuesto 2019, Mauricio Macri se reunirá desde las 17 con gobernadores oficialistas y opositores en la Casa Rosada. El Presidente tendrá este martes la foto política que tanto buscó, aunque para lograr un acuerdo continuarán las conversaciones.
Antes del encuentro en la Casa Rosada, el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, reunió a los gobernadores en el marco del Consejo Federal de Inversiones (CFI), en donde los mandatarios unificarán su discurso de cara a su reunión con Macri. En la mesa se encuentra, en el grupo de los opositores “dialoguistas” la gobernadora de Tierra del Fuego Rosana Bertone.
En el Gobierno son optimistas y creen que hoy lograrán el compromiso de al menos 18 de los 24 gobernadores. A cambio, la gestión de Macri cederá ante dos reclamos puntuales de los mandatarios provinciales: postergarán por un año la baja de Ingresos Brutos o del impuesto a los sellos, para que se mantenga en 6% y no se rebaje a un 5 por ciento, y se elevará de 0,25% al 1% el gravamen para los bienes personales en el exterior, lo que significará unos $16.000 millones que se coparticiparán.
De esta forma, pese a no firmar ningún documento, el jefe de Estado obtendrá un gesto de gobernabilidad por parte de las provincias en medio de la crisis económica, tras la escalada del dólar, y la renegociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para conseguir un adelanto de dólares con el objetivo de cumplir con los compromisos de cara a 2019.
En la foto no están todos los gobernadores. En este sentido, los mandatarios provinciales que avisaron su no asistencia son: Carlos Verna (La Pampa); Alberto Rodríguez Saá (San Luis); Alicia Kirchner (Santa Cruz); Gustavo Bordet (Entre Ríos) y Miguel Lifschitz (Santa Fe). Aún resta confirmar si Gerardo Zamora (Santiago del Estero), será de la partida.
El ajuste
El presupuesto incluirá un ajuste de $400.000 millones, de los que $100.000 millones serán absorbidos por las provincias. Este monto incluiría el Fondo Solidario (Fofeso) y resta definir detalles sobre la transferencia de los subsidios a la tarifa social de las empresas eléctricas, lo que representa entre $15.000 y $20.000 millones.
(con información de TN)
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