Este lunes, una nueva denuncia por estafa fue radicada en sede policial de la ciudad de Río Grande. Pero esta vez no se trata de una maniobra bancaria o una amenaza telefónica.
Todo comenzó como una historia de amor: un vecino de 73 años, sólo desde hace al menos 10, conoció a una mujer de Misiones por Internet y comenzó una relación a la distancia.
La estafa
La misionera, 40 años menor que el anciano, llegó hasta Río Grande invitada por éste junto a sus cuatro hijos, todos menores de edad. Los gastos corrieron por cuenta del hombre: gastó al menos $40 mil en el traslado.
Una vez en la ciudad, la mujer se radicó en el domicilio de la víctima, a quien comenzó a exigirle constantemente dinero. Todo esto trajo peleas a la convivencia de la hasta entonces feliz pareja.
Para tranquilizar los ánimos, el hombre cedió ante el último requisito de la mujer: cederle la cédula que la habilitaba a manejar su vehículo, un Fiat Uno. Sin embargo, el amor no dejó que el hombre viera la verdadera intención de la estafadora: en realidad le hizo firmar la transferencia de vehículo.
Días después la mujer dejó el domicilio, provocando que la víctima radicara en sede policial la denuncia pertinente. Sin embargo, se desconoce el futuro de la denuncia, ya que la misma víctima firmó su consentimiento para la transferencia.
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