rminada la marcha del 21F que convocó Hugo Moyano contra la Casa Rosada,los datos sobre la cantidad de manifestantes también dan cuenta de la pelea entre el gremialista y el macrismo. Los números sobre los presentes en el Bajo porteño esta tarde varían según la perspectiva. E incluso hubo informaciones contradictorias de parte del Gobierno.
Para el gremio de los camioneros, que principal organizador de la movilización,asistieron alrededor de 500.000 personas. Los gobiernos nacional y de la Ciudad de Buenos Aires dijeron a LA NACION que hubo unas 90.000. Y el ministro de Trabajo,Jorge Triaca, informó en una entrevista con el programa Tarde para nada, de Radio con vos, que la policía estimaba unas 85.000 personas. Sin embargo, poco después, el Ministerio de Seguridad de la Nación difundió un parte donde reconoció una concentración, aproximadamente, de 140.000 personas.
Desde los movimientos sociales, que también formaron parte de la movilización, estimaron que la convocatoria total fue de entre 350 y 400.000 asistentes, de los cuales, aseguran, aportaron unos 150.000, según dijeron a este medio referentes de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP) y de Movimiento Evita.
El dato sobre la fuerza de convocatoria de Moyano es de suma importancia, tanto para el protagonista de la marcha, como para Cambiemos. El jefe sindical busca demostrar poder frente a las causas judiciales que lo investigan por corrupción y ante la pérdida de apoyo en el mundo sindical, entre ellos del gastronómico Luis Barrionuevo y el jefe de los trabajadores de estaciones de servicio, Carlos Acuña, uno de los jefes de la CGT. Mientras tanto, el Gobierno quiere verlo aislado en el marco del flagrante enfrentamiento que mantiene con el camionero.
La multitudinaria marcha se llevó a cabo hoy en el centro porteño, en avenida Belgrano y 9 de Julio. El principal motivo esgrimido por los gremios y organizaciones sociales que participaron del reclamo al presidente Mauricio Macri fue la necesidad de un cambio en el modelo económico que «hambrea» a la sociedad. También apoyó el kirchnerismo, con el aval de la ex presidenta y actual senadora, Cristina Kirchner.
Pero desde el oficialismo acusan a Moyano de convocar a la marcha para mostrar fuerza ante las investigaciones que impulsa Cambiemos en su contra en la Justicia.
Moyano es investigado, junto a su hijo, Pablo, y otros familiares, por presuntas maniobras de lavado de dinero y evasión impositiva. La Justicia sospecha de transferencias bancarias millonarias realizadas entre la empresa de correo privado OCA y Camioneros.
Además, Moyano se encuentra en el centro de las sospechas en otra causa por sus supuestos vínculos con la barrabrava de Independiente -club que preside-, que podrían configurar una presunta asociación ilícita.
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