El legislador de la Unión Cívica Radical – Cambiemos, Pablo Blanco, publicó una dura carta repudiando los dichos del presidente del Partido Socialista, Antonio Bonfatti, quien había comparado a Mauricio Macri con Hitler.
A continuación, el escrito del parlamentario radical:
El diputado provincial del socialismo santafesino y ex gobernador de su provincia, Antonio Bonfatti, comparó al Presidente Mauricio Macri nada más y nada menos que con Adolfo Hitler. Lo hizo en el marco de una charla sobre los derechos de los trabajadores en el teatro del Sindicato de Empleados de Comercio de la Ciudad de Rosario. Allí tuvo el desparpajo de sostener que “de joven creía en ese concepto que dice que el pueblo nunca se equivoca. Pero se equivocó con Hitler y ahora se equivoca con Macri”.
Estas expresiones son inadmisibles y directamente inaceptables en un régimen democrático que goza de buena salud donde rige con total plenitud el Estado de Derecho. Las declaraciones, en boca del exgobernador santafesino son francamente sorprendentes y lastiman no sólo a nuestra democracia sino a todas las personas de bien de nuestro país que saben elegir perfectamente a sus gobernantes.
No alcanza con pedir disculpas para que todos quienes leímos o escuchamos esas declaraciones no se enteren de que el señor Bonfatti es dueño de un pensamiento soberbio y discriminador, emparentado con la repudiable figura con la que comparó al Presidente de todos los argentinos.
Bonfatti también ha agraviado de manera explícita a la Comunidad Judía Argentina y ha demostrado, quizá sin quererlo de manera consciente, un desprecio impresionante por el pueblo (el mismo que lo llevó a ser gobernador de su provincia) y por todo aquel que piense distinto.
Parece mentira que nada más ni nada menos que el Presidente del Partido Socialista a nivel nacional haya afirmado semejante barbaridad en un hecho que, para muchos, no quedará en la anécdota. Lo que ha hecho este señor es ponerle punto final a su carrera política y, muy probablemente, a la hegemonía que su partido ha venido ejerciendo en Santa Fe.
Da pena que la campaña política logre sacar de sus cabales o revelar la verdadera personalidad agresiva de las personas. La democracia, como nos enseñó el Doctor Raúl Alfonsín, se trata justamente de lo contrario. Se trata de actuar con dignidad, se trata de ser amplios, se trata de aceptar que todos somos diferentes y que cada uno tiene cosas buenas para aportar a una construcción colectiva.
Comparar a nuestro Presidente con uno de los mayores genocidas de la historia de la humanidad, además de ser una inexactitud y un grave error ya no político sino humano, demuestra que el Partido Socialista -a quien toda mi vida admiré- necesita una urgente renovación.
Es cierto que Bonfatti se ha disculpado. Pero no es menos cierto que nos ha agredido, que ha dañado a las instituciones y, en definitiva, a sí mismo. Bonfatti quedó solo, triste y final.
Por Pablo Blanco, legislador de la UCR Cambiemos
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