Así como hace casi un mes en la Ciudad de Buenos Aires se anunció un programa para extender la jornada simple en todas las escuelas primarias y secundarias estatales porteñas para reforzar el aprendizaje de los alumnos, el operativo se ampliará a todo el país.
El Ministerio de Educación de la Nación lanzará un plan que contempla agregar horas de clase en clubes, bibliotecas, centros culturales, radios y teatros, ya que muchas instituciones están ocupadas a la mañana y a la tarde. La idea es ejecutarlo, en una primera etapa, en unos dos mil colegios.
La prolongación del horario escolar es una de las deudas a nivel nacional. “Queremos extender la jornada escolar, creemos que no podemos avanzar en la incorporación de las competencias, las habilidades, los valores que queremos para nuestros niños y jóvenes si no trabajamos más tiempo con ellos”, dijo hace unas semanas el ministro de Educación, Esteban Bullrich.
Para poner en marcha el proyecto, varios equipos del organismo viajarán la próxima semana a las provincias de Misiones, Corrientes, Chaco, Mendoza y Neuquén.
Jornada extendida
La iniciativa es consecuencia de la “Declaración de Purmamarca”, un documento firmado en febrero por Bullrich y sus pares de todo el país, que fija los ejes centrales para avanzar hacia una transformación de la enseñanza. Allí se menciona el compromiso de “implementar progresivamente la jornada extendida a través de actividades culturales, deportivas, creativas, artísticas y sociales”. La clave no está en sumar horas al colegio, sino en incorporar contenidos y nuevas habilidades (especialmente en deportes y tecnología) y, a su vez, que los chicos reciban más contención, sobre todo en los sectores más vulnerables.
De alguna manera, la jornada extendida también significa una ayuda para muchos padres exigidos en el ámbito laboral, ya que les permite cumplir con horarios largos teniendo la tranquilidad de que sus hijos se encuentran cuidados y motivados en la escuela.
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