El viernes pasado, se dio a conocer un polémico fallo que invita a modificar lo que se sabe acerca de los controles de alcoholemia que realiza la Dirección de Tránsito en la ciudad.
Un vecino había sido detenido en su momento por un operativo y al someterse al control de alcohol en sangre, éste dio positivo y muy por encima de lo que especifica la ley. Sin embargo, el joven firmó “en disconformidad” la constatación del delito por no existir un segundo examen que convalide la primera prueba.
En un primer momento, la multa se le computó, pero al asesorarse legalmente logró conseguir un fallo favorable de los Tribunales del Distrito Norte. El abogado defensor, Dr. Fernando Lapadula, expuso y relató en los estudios de Radio Fueguina cómo ocurrieron los hechos esa madrugada.
En el operativo, su defendido declaró que “no había ingerido alcohol, que recién se levantaba; que debía tratarse de un error y solicitó que se repita la prueba”, y siguió: “Al no estar contemplado en la norma la contraprueba, firmó en disconformidad”. “La posibilidad de un falso positivo existe”, explicó, y aclaró: “La idea, es que se juzguen las garantías constitucionales, y que se juzgue y condene bien”.
Lo cierto es que se trata de un fallo que puede llegar a generar un peligroso antecedente y obliga a los encargados de redactar las normas a asesorarse y trabajar en la implementación de la “contraprueba”.
Imagen: Archivo
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