“No terminó del todo bien” el encuentro del secretario de Obras Públicas con un vecino en la c ancha de césped sintético del Cono de Sombra.
El hombre había llevado a su mascota, un perro, a hacer sus necesidades dentro del predio dedicado al juego de los niños.
Lejos de sentirse avergonzado, el desaprensivo ciudadano reaccionó de mal modo cuando fue reprendido por el funcionario.
Le dije “Discúlpeme, pero ¿Ud está consciente de lo que está haciendo?». El tipo. Lógicamente, reaccionó mal.
Así refería el curioso y llamativo episodio Coldorf en los micrófonos de Radio Fueguina.