El presidente electo, Mauricio Macri, juró como presidente de la Nación por Dios y los Santos Evangelios.
Rodeado por miles de personas que lo vivaban, Macri arribó al Congreso a las 11.35 escoltado por el cuerpo de Granaderos a Caballo y acompañado por su esposa, Juliana Awada, su hija menor, Antonia, y la hija de su mujer.
El mandatario electo fue recibido por la Comisión de Exteriores y por el presidente provisional a cargo del Poder Ejecutivo, Federico Pinedo.
Luego de jurar como mandatario en la Asamblea Legislativa en el Congreso, Macri agregó que «veo el país como un gran equipo conformado por millones de seres esperanzados y les comprometo mi esfuerzo».
«En el siglo pasado se buscaban genios que lo resolvieran todo solos», apuntó, y continuó con que «a lo largo de mi vida pude armar buenos equipos que construyeron buenas soluciones y en este nuevo desafío necesitamos armar equipos diversos».
Prometió «trabajar incansablemente» para que dentro de cuatro años «todos los argentinos, especialmente aquellos que más nos necesitan, estén viviendo mejor».
El presidente ratificó ante la Asamblea Legislativa que las tres ideas centrales de su gestión serán «pobreza cero, derrotar el narcotráfico y unir a los argentinos» al tiempo que prometió «un país unido en la diversidad».
«El país tiene sectores que piensan de diferentes maneras pero no está dividido, ya pasaron las elecciones, y ahora todos debemos unirnos para crecer y mejorar», dijo.
Tras ser recibido el Salón Azul del Congreso, la vicepresidenta Gabriela Michetti presidió la ceremonia, en la que Macri juró por «Dios y los Santos Evangelios desempeñar con lealtad y honestidad» el cargo de presidente de la Nación.
La reunión plenaria de los legisladores se realizó en el recinto de la Cámara de Diputados, presidida por el presidente provisional del Senado, Federico Pinedo.
Macri y Gabriela Michetti asumieron la Presidencia de la Nación tras haber triunfado sobre el binomio Scioli-Zannini en la segunda vuelta electoral por el 51,34 contra 48,66 por ciento de los votos.
La jura se celebró en una reunión plenaria de diputados y senadores, en el recinto de la cámara baja, donde asistieron otros jefes de Estado, gobernadores, ministros de la Corte, jueces, y las máximas autoridades de las Fuerzas Armadas, entre otros invitados especiales.
Esta Asamblea Legislativa tuvo un suceso inaudito en estos 32 años de democracia, ya que la mayoría de los legisladores kirchneristas decidió no concurrir en rechazo a la sentencia judicial de la jueza María Servini de Cubría sobre la vigencia del mandato de la mandataria saliente Cristina Fernández de Kirchner.
El bloque de diputados del FPV resolvió no asistir a la Asamblea Legislativa «en solidaridad con Cristina» ante el fallo de Servini que da por finalizado el mandato de la actual presidenta en las últimas horas de ayer.
La bancada justicialista del Senado, donde el kircnerismo incondicional tiene menos presencia, otorgó libertad de conciencia a sus integrantes para que resolvieran si asistíann o no a la ceremonia.
Tras su mensaje, Macri, junto a su esposa, se retiró del Congreso con destino a Casa de Gobierno trasladándose por Rivadavia y Avenida de Mayo, con la escolta del Regimiento de Granaderos a Caballo.
Miles de ciudadanos escoltaron su marcha, al grito de «Argentina», «Argentina» o coreando el lema de campaña del PRO: «Sí, se puede».
A las 13.15, Macri fue recibido con honores militares en Casa de Gobierno, luego recibirá el saludo del Jefe de Casa Militar de la Presidencia de la Nación y se dirigió al despacho presidencial donde aguardó el inicio de la ceremonia de traspaso de la banda presidencial y el bastón que tuvo lugar en el Salón Blanco.