Federico Antonio Díaz
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Federico Díaz, testigo del Operativo Cóndor

El cabo primero Díaz tuvo como tarea vigilar a tres de los miembros del Operativo que fueron encarcelados en Río Grande. “Eran personas instruidas y patriotas”, dijo rememorando esos días de septiembre de 1966.

El 28 de septiembre de 1966, mientras el príncipe consorte inglés Felipe de Edimburgo se hallaba de visita protocolar en Buenos Aires, dieciocho jóvenes liderados por el militante peronista Dardo Cabo y el nacionalista Alejandro Giovenco se apoderan del control del vuelo 648 de Aerolíneas Argentinas que se dirigía de aeroparque porteño a la ciudad de Río Gallegos y lo desvían hacia las Islas Malvinas.

Díaz después, y luego de deponer las armas, tres de los miembros del Operativo Cóndor, entre los que se encontraba el propio Alejandro Giovenco, fueron apresados en nuestra ciudad y a cargo de vigilarlos se colocó al entonces cabo primero Federico Díaz.

Federico Antonio Díaz, cabo de la policía Territorial, custodiando a Alejandro Giovenco
Federico Antonio Díaz, cabo de la policía Territorial, custodiando a Alejandro Giovenco

A 49 años del suceso histórico, Díaz visitó los estudios de Radio Fueguina y relató sus días al cuidado de los “cóndores”, a quien recordó como “patriotas y personas muy instruidas”.

Además, rememoró la relación de amistad que guardaba con ellos en los meses de septiembre y octubre de 1966 e incluso criticó el trato que recibieron: “En vez de considerarlos héroes los depositaron en calabozos”.

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