La semana pasada, el Papa anunció una medida histórica para la Iglesia, al permitir que los sacerdotes concedan el perdón a las mujeres que hayan abortado. Mañana, otra decisión de Francisco también promete seguir con el camino de apertura que ha abierto el Papa argentino: va a anunciar un nuevo proceso para anular los matrimonios.
Como lo hizo con el perdón del aborto, también comunicará el cambio a través de dos cartas. Las dos cartas «motu proprio» de Jorge Bergoglio se titulan «Mitis Iudex Dominus Iesus», la referente al código de derecho canónico, y «Mitis et misericors Iesus», la que tiene que ver con el código de los cánones de las Iglesias orientales y tratan de la «reforma del proceso canónico por las causas de declaración de nulidad del matrimonio».
Los textos serán presentados en una rueda de prensa a las 7 de la mañana hora argentina en el Vaticano por seis eclesiásticos, entre ellos el decano de la Sacra Rota romana y presidente de la Comisión especial para la reforma del proceso matrimonial canónico, monseñor Pío Vito Pinto.
Este nuevo proceso para anular los matrimonios será más simple y la reforma se establece después que el propio Papa –y generaciones de católicos– se quejaran de que el sistema actual es complicado, costoso y a menudo injusto.
Las nuevas reglas se establecen después que una comisión de abogados canónicos pasara un año estudiando los medios para simplificar el proceso, pero respetando el principio de la indisolubilidad del matrimonio. La Iglesia sostiene que los católicos sólo pueden volver a casarse si un tribunal eclesiástico declara inválido su primer matrimonio.
Este proceso de anulación, si se consigue, tarda años. Francisco ya había propuesto que las anulaciones sean gratuitas por considerar que todos los católicos tienen derecho a la Justicia por parte de la Iglesia.
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