El partido, que es arbitrado por Fernando Rapallini, cuenta con televisación en directo de Telefé y significa una prueba de carácter para el equipo de Edgardo Bauza, que juega con la presión de tener que ganar para alcanzar a Boca en la cima.
Cinco victorias consecutivas, dos de ellas por Copa Argentina, acumula un equipo de Boedo cada vez más afianzado en su funcionamiento, aunque sin impresionar por su vuelo futbolístico.
San Lorenzo (46) es el segundo conjunto más goleador del torneo (34) después de Boca (38), el de la valla menos vencida (13) y junto a Racing, uno de los dos con mejor rendimiento de local con nueve triunfos, un empate y una derrota en once presentaciones.
Su última derrota ocurrió el pasado 22 de abril ante Danubio de Uruguay 1-0 en el Bajo Flores, la noche de la eliminación en la Copa Libertadores 2015, tres días después de su caída más reciente en el ámbito local ante Aldosivi de Mar del Plata.
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